Ensalada de marisco y salsa rosa
Vamos a preparar una ensalada muy refrescante. Esta Ensalada de marisco y salsa rosa la consumimos en casa principalmente en verano pero en Navidad también la solemos hacer en algún momento porque está deliciosa.Las ensaladas son ese delicioso plato comodín que nos ofrecen mil posibilidades y que siempre van genial ya sea como entrante, como acompañamiento e incluso como plato único, por eso nunca tendrás suficientes recetas de ensalada en tu recetario.
Lo mejor de las ensaladas es que cada día puedes hacer una diferente: de pasta, con frutas, con legumbres, con carne, con pescado, templadas, refrescantes, saludables… Podríamos seguir así un buen rato y no terminaríamos porque lo cierto es que, podemos poner a la ensalada lo que queramos, lo más importante es echarle un poco de imaginación e innovar.
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Otra de las cosas por las que me encantan las ensaladas es que son ideales para aprovechar cualquier cosita que tengamos por la nevera. La cocina de aprovechamiento es fundamental, no podemos tirar alimentos así que si tienes un resto de una lata de atún, o unas legumbres cocidas, o media zanahoria que quedó del guiso ya puedes ponerlo todo en la ensalada y aprovechar al máximo. ¡Ya sabéis que en La Cocina de Enloqui no tiramos nada! Te invito a que hagas lo mismo y trates de sacar el mayor partido posible a todos esos restos.
Y ahora sí, vamos a preparar esta deliciosa Ensalada de marisco con salsa rosa.
Ingredientes para 4 personas
Media lechuga iceberg
200 gramos de gambas peladas
200 gramos de surimi
1 lata de maíz
2 latas de atún al natural
2 huevos duros picados (opcional)
Salsa rosa
Unos brotes de soja (opcional)
Elaboración
Pon en un cazo agua a calentar. Cuando rompa a hervir añade las gambas peladas y un poco de sal. En pocos minutos estarán listas, lo sabrás porque comienzan a flotar en el agua.Ahora es el momento de poner la salsa rosa. Yo no tenía por casa, así que mezclé un poco de mayonesa con un toque de ketchup, mezclas muy bien y listo, ya tienes una salsa rosa muy rápida.
Llegado el momento de servir coloca en una fuente vistosa y decora con unos palitos de surimi y unos brotes de soja. Otra opción es reservar los huevos duros y decorar con ellos también.
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