¿Cómo surgió la idea de estos falsos phoskitos? Hace unos días, hablando vía Twitter con Tito, comentábamos (el pobre, a dieta) que no había nada mejor que el primer bocado a un phoskitos, tan bueno, ese sabor,...y después de que mi primera idea de desafío fuera un completo y horrible desastre (culpa del terrible y nuevo mascarpone de nuestros amigos de Mercadona), aquí me vino la iluminación divina...la inspiración que hizo temblar a mi chico...las palabras mágicas que dan paso a que la cocina se llene de mascarpone y harina por doquier gracias al robot...: "cariño, he tenido una idea para el Desafío". Y si, este desafío es suyo por que me ha ayudado en la mayor parte y es de recibo darle las gracias cuando me echa una preciada mano. Si no fuera por el este mes habría tenido que bajarme del tren y esperar el siguiente. Gracias. Y mi idea fue: Falsos Phoskitos de Tiramisú.
Vamos a por la receta?
Ingredientes:
Para el bizcocho genovés (para una bandeja de horno)
4 huevos
120 gramos de azúcar
120 gramos de harina de repostería
Para el relleno de mascarpone:
2 claras de huevo
4 yemas
100 gramos de azúcar
400 gramos de mascarpone
4 láminas de gelatina
150 ml de nata (crema de leche)
Para el borracho:
125 ml. café
50 ml de licor
Para la cobertura:
Dos tabletas de chocolate de repostería.
Preparación:
Para el bizcocho genovés: Primero tamizamos la harina y la reservamos. Separamos las claras de las yemas y montamos las claras ayudándonos de las varillas eléctricas. Mezclamos el azúcar con las yemas hasta que quede como una pomada.
Añadimos las yemas a las claras montadas SIEMPRE con movimientos envolventes con una varilla manual o una espátula (si lo hacemos demasiado deprisa, corremos el riesgo de que las claras se bajen).
Cuando lo tengamos integrado todo, añadimos poco a poco la harina tamizada y nuevamente con movimientos envolventes mezclamos hasta que esté todo homogéneo.
Ponemos una lámina de papel sulfurizado en la bandeja de horno y vertemos la mezcla. Con la ayuda de una espátula, la extendemos hasta que quede con un grosor uniforme y ocupe toda la bandeja.
Con el horno precalentado a 180º con calor arriba y abajo y sin aire, horneamos 12-15 minutos, controlando siempre que hay que sacarlo cuando empiece a estar dorado.
Con la plancha aún caliente, despegamos poco a poco el bizcocho del papel (un truco es darle la vuelta sobre otro papel para que la lámina con la que hemos horneado quede encima y así nos sea más fácil despegarlo). Una vez lo tenemos despegado, lo enrollamos sobre si mismo dándole la forma característica para que se enfríe así y nos sea más fácil trabajarlo.
Lo dejamos reposar de un día para otro, para que coja la forma y se enfríe totalmente. Seguiremos con el relleno, para ello montamos las claras a punto de nieve. A parte, batimos las yemas con el azúcar hasta que quede como la espuma. Cuando tengamos esa consistencia, le añadimos muy poco a poco el mascarpone y batimos poco a poco. Cuando el mascarpone ya esté integrado, le añadimos las claras montadas. Diluimos las láminas de gelatina en un dedo de agua caliente y la incorporamos al relleno para que así quede más consistencia. La nata (crema de leche), montada, será lo último que añadiremos mediante movimientos envolventes con una espátula.
Para preparar el borracho, pondremos a hervir el café y el licor, el tiempo suficiente para que el alcohol del segundo se haya evaporado. Dejamos enfriar.
Para montar nuestros falsos phoskitos, empezaremos empapando bien el bizcocho con ayuda de una brocha para que tengan el sabor característico del postre italiano. Después, lo rellenaremos con la crema de mascarpone y espolvorearemos cacao en polvo por encima. Lo dejaremos nuevamente enrollado en la nevera, un día, para que podamos cortarlo y cubrirlo de chocolate sin ningún problema.
Para cubrir nuestros falsos phoskitos, derretiremos al baño maría (o con mucho cuidado en el microondas) las tabletas de chocolate.
Sacamos el brazo de la nevera y cortamos porciones de unos dos dedos de gordo. Los bañamos en chocolate y los dejamos escurrir sobre una rejilla antes de meterlos en la nevera donde el chocolate se endurecerá.
Y ya tenéis listo el desayuno, la merienda, el picoteo de media mañana...
Qué nos tendrá preparado Mari Luz para el desafío salado del mes que viene?? en unos días nosotros lo sabremos! vosotros, el próximo día 20. Mientras, podéis pasaros por las cocinas de mis compañeros a ver qué se les ha ocurrido a ellos!!!