Pero, de momento, seguimos descubriendo la gastronomía propia, en esta ocasión con un dulce que, como os he dicho, se laman fardelejos y son típicos de La Rioja, en concreto de un puebligo llamado Arnedo.
Se trata de un dulce de origen árabe consistente en un recubrimiento de hojaldre (aunque yo me he permitido una pequeña licencia en este punto) y un relleno a base de almedras molidas. Delicioso, como veis.
Receta de los fardelejos
6 láminas de pasta filo o pasta brisa
1 clara de huevo
130 gr. de almendra molida
70 gr. de azúcar glas (y algo más para espolvorear después)
la ralladura de un limón
aceite de oliva
Mezclamos la almendra molida, el azúcar glas, la clara de huevo y la ralladura de limón hasta formar una pasta uniforme. Reservamos.
Cortamos pedacitos de pasta filo, de tamaño más o menos parejos. Los vamos pincelando con aceite de oliva y los juntamos de tres en tres pedacitos, unos encima de otros. Se quedarán pegados por culpa del aceite.
Rellenamos cada montoncito de pasta filo con un poco de la masa de almendra que hemos hecho al principio y envolvemos formando paquetitos de la forma que más nos guste.
Ponemos abundante aceite de oliva a calentar. Cuando esté bien caliente, freímos los fardelejos por ambos lados, cuidando de que no se quemen.
No pondremos más de 2 o 3 a la vez para que no se peguen.
Aún calientes, espolvoreamos con azúcar glas.Ya veis que es una receta muy sencilla y aguantan luego perfectamente durante varios días en una caja de lata, las de galletas de toda la vida.
Si os gustan los dulces con almendra, los fardalejos están hechos especialmente para vosotros, no lo dudéis.
Vamos a ver cuantas versiones diferentes ha reunido Isa en el reto:
Y si os apetece algún otro dulce típico de nuestra gastronomía, pero un poco diferente, os sugiero:
leche frita
trenza de Almudévar
buñuelos de calabaza