Me encanta ese momento en que vienen amigos a casa y puedes hacer un postre rico rico y sin pensar como transportarlo, no sé si os pasa, pero según qué postres estan destinados a sufrir en los traslados (por ejemplo los sombreritos de los cupcakes).
Así que esta vez opté por hacer un flan de huevo porque no es el postre ideal para llevar de un lado a otro y además, hacía un montón que no lo hacía. Después ya me aventuré con la leche condensada y con el coco, aunque el coco me hizo dudar mucho porque no le suele gustar a todo el mundo.
La receta la he encontrado en la web Recetas comidas, un buscador de recetas.
Otro día haré el flan de huevo de toda la vida porque me parece un postre buenísimo (a mí me gusta muchísimo más que el de vainilla).
Ingredientes: (8 flanes)
300 gr. de leche condensada
600 ml. de leche
6 huevos
100 gr. de coco rallado
Caramelo líquido
Preparación
Calentamos la leche en un cazo y cuando esté tibia la apartamos. Le añadimos la leche condensada y removemos. Reservamos.
Batimos los huevos en un bol.
Añadimos la mezcla de leches a los huevos e incorporamos también el coco rallado. Removemos bien hasta que todo quede bien mezclado.
Utilizaremos o bien una flanera grande o bien 8 flaneras pequeñitas. Primero caramelizamos el fondo y las paredes y luego vertimos el flan en el molde y lo ponemos al baño maría 50 minutos (en el horno no) o hasta que al pincharlo con un palillo salga limpio.
Dejar enfriar a temperatura ambiente y una vez atemperado desmoldar y meterlo en el frigorífico para que se ponga fresquito.
Opcional, servir el flan acompañado de nata (crema de leche) o helado.
Espero que os guste!! Llevo un poco de retraso con los posts, intentaré ponerme al día porque tengo varios casi a punto. Besitos!!!
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