Aunque sigue encendiendo el horno para otras recetas, en esta ocasión he querido preparar un flan sin horno, y además sin huevo, por lo que se presenta como una opción perfecta también para los intolerantes al huevo. Cuando vi la receta en este blog me enamoré a primera vista de él. El flan se cuaja en la nevera gracias a la cuajada, en sólo unas horas, sin necesidad de sudar en la cocina. Y el resultado es delicioso. Ya me contaréis si lo hacéis.
INGREDIENTES:
Caramelo líquido, el mío casero, pero podéis hacerlo comercial
500 ml. de nata (crema de leche) para montar
250 gr. de queso crema
2 sobres de cuajada
200 ml. de leche entera
130 gr. de azúcar
8 o 10 galletas tipo Napolitanas
PREPARACIÓN:
Caramelizamos un molde rectangular de un litro y medio de capacidad con el caramelo líquido (ya sea casero o comercial). Reservamos. Separamos 100 ml. de leche y la otra la ponemos en un cazo junto con el azúcar, la nata (crema de leche) y el queso, removemos bien al fuego hasta que se disuelva completamente el queso y dejamos hasta que llegue a ebullición.
Disolvemos los sobres de cuajada en la leche que habíamos reservado y añadimos al cazo, sin dejar de remover llevamos de nuevo a ebullición. En este punto añadimos al molde la mezcla y en la superficie le ponemos las galletas, para que, al desmoldar, nos quede de base. Dejamos enfriar y llevamos a la nevera durante tres o cuatro horas. Desmoldamos dando golpecitos al molde.
No tenéis excusa para no prepararlo, es fácil y rápido.
Feliz jueves.