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#EnCasaConTheTravellerCookPor: Redacción
Estamos a punto de completar la segunda semana de confinamiento y son miles las actividades e iniciativas que han surgido para ocupar nuestro tiempo y hacer más ameno este encierro masivo en casa.
Desde conciertos on-line de grandes artistas como Rozalén, pasando por sesiones de yoga, cardio y pilates con tutoriales de YouTube, hasta maratones de Netflix, sofá y manta. Cualquier excusa es buena para combatir la crisis del coronavirus, y más aún, si una de estas actividades es cocinar en familia.
Os traemos una receta muy sencilla y fácil de hacer. Y, lo más importante, con ingredientes que podemos encontrar fácilmente por casa, de forma, que no nos hará falta salir al supermercado y poner en riesgo la salud de todos.
Ingredientes: para 20 unidades
125g de mantequilla en punto pomada
150g de azúcar
10g de azúcar avainillado o 5g de esencia de vainilla si tenemos por casa
1 huevo L
Una pizca de sal
225g de harina para todo uso
Frutos secos, coco rallado, azúcar para glasear... (opcional)
Elaboración:
Hacer estas galletas de mantequilla es muy sencillo. No te llevará más de 1 hora el proceso completo, desde el amasado, reposo y horneado.Comenzamos batiendo con varilla manual o eléctrica la mantequilla, en punto pomada, junto a los azúcares. Nosotros hemos usado azúcar moreno, pues es el único que teníamos por casa, pero podéis utilizar cualquiera. Una vez el azúcar se haya incorporado perfectamente en la mantequilla, añadimos un huevo y seguimos batiendo hasta que no queden grumos.
Mezclamos una pizca de sal, la punta de una cuchara para té, por ejemplo, con la harina, y vamos añadiéndolas poco a poco a la masa sin dejar de batir. A medida que vayamos añadiendo la harina, la masa irá cogiendo cuerpo, buscamos una textura sólida y arenosa, es probable que al final tengamos que trabajar la masa con las manos.
Hay muchos métodos para el reposo, como bien dice el refrán, cada maestrillo con su librillo. Nuestro preferido es el de dar forma de rulo a la masa con ayuda del papel film, y dejarla reposar en el congelador entre 30 y 45 minutos.
Una vez pasado el tiempo de reposo, la masa estará lo suficientemente dura (sin que haya congelado) como para cortar las pastas del grosor que deseemos sin que se deformen en exceso, luego podremos terminar de moldearlas con los dedos de las manos, aunque el encanto de las galletas caseras es precisamente su imperfección.
Decoramos y acompañamos con lo que tengamos por casa, frutos secos, coco rallado, azúcar para glasear, trocitos de chocolate o mermeladas. Si no queremos o no tenemos ninguno de estos ingredientes, al natural, van a estar igual de deliciosas.
Horneamos las galletas a 180ºC, con calor arriba y abajo y ventilación encendida, por unos 10-15 minutos. Cuando veamos que han empezado a dorar ligeramente, podemos apagar el horno y que el calor residual termine de cocinarlas, además de contribuir con el medio ambiente y hacer un uso eficiente de la energía.
Una vez horneadas solo tendremos que dejarlas enfriar y ya estarán listas para untar en el café mañanero, o con el cacao de antes de dormir.
Comparte tus fotos de galletas de mantequilla o trucos durante el elaborado en redes sociales con el hastag #EnCasaConTheTravellerCook