45 galletas
INGREDIENTES
250 g de harina
200 g de queso tipo Philadelphia
100 g de mantequilla a temperatura ambiente
30 g de azúcar más 100 g aproximadamente para remojar y espolvorear.
1 pizco de sal
ELABORACIÓN
Mezclar la mantequilla con el queso el azúcar y la sal.
Cuando se forme una crema, añadir la harina poco a poco hasta formar una masa que no se pegue y sea manejable.
Dividir la masa en dos.
Entre dos láminas de papel de hornear colocar uno de los trozos y, con ayuda de un rodillo, formar un rectángulo de 1 cm de grosor.
Hacer lo mismo con el otro pedazo de masa. Colocar ambos en el congelador durante aproximadamente 15 o 20 minutos.
Transcurrido el tiempo, tomar uno de los rectángulos, quitarle el papel de un lado y espolvorear con tres cucharadas de azúcar (en este paso, también puede mezclarse previamente el azúcar con un poco de canela).
Enroscarlo por el lado más largo intentando que quede lo más compacto posible.
Volver a introducir en el congelador durante 20 minutos.
Hacer lo mismo con el otro trozo.
Por último, precalentar el horno a 180º. Mientras tanto, cortar los rulos con cuidado de no deformarlos en círculos de aproximadamente 1 o 1,5 cm de grosor.
Colocar azúcar en un bol y pasar las galletas por azúcar.
Colocarlos en una bandeja de horno cubierta por papel de hornear dejando separación entre las galletas.
Cocer durante 20 minutos, o hasta que empiecen a dorarse un poco por los bordes.