Desde el día que vi por primera vez las galletas springerle, me quedé enamorada de ellas, aparte de ser preciosas, están súper súper buenas, se pueden hacer de diferentes sabores.
Hace unas semanas asistí a un curso de galletas springerle impartido por Sergio de Cukiart Valencia, la experiencia ha sido fantástica, además de aprender mucho, me lo he pasado genial. Es un curso que os recomiendo al 100% si tenéis la oportunidad de asistir algún día.
Como había que poner en práctica, los conocimientos que he adquirido en el curso, me puse a ello.
La receta que os traigo hoy, es de Cukiart Valencia, la hemos hecho en el curso.
Ingredientes:
¼ cucharadita de carbonato de amonio
1 cucharada de leche
3 huevos M
340 gr de azúcar glass tamizado
57 gr de mantequilla a temperatura ambiente
½ cucharadita de ralladura de limón
¼ cucharadita de aroma concentrado de anís
1 pizca de sal
350 gr de harina (esta cantidad puede variar dependiendo de la humedad)
100 gr de maicena Preparación:
Disolver el carbonato de amonio junto con la cucharada de leche y dejar reposar ½ hora.
Batir los huevos con varillas, durante unos 10 minutos a velocidad alta hasta que tripliquen su volumen.
Incorporar lentamente el azúcar glass (a velocidad media) y la mantequilla ablandada hasta que se integren bien.
Añadir la mezcla del carbonato de amonio, la ralladura de limón, el aroma de aní y la sal.
Seguir batiendo a velocidad baja hasta que esté todo bien integrado.
Cambiar la pala de la batidora por la pala K y empezar a añadir las harinas.
Sacar la masa de la batidora y envolverla con papel film y dejar 30 minutos en el frigorífico.
Pasado ese tiempo, si se le quiere dar color, se separan en trozos y se tiñen con colorante en gel. Volver a meter ½ hora en el frigorífico.
Sacar la masa del frigorífico, espolvorear con un poco de harina la zona de trabajo, el rodillo y el molde que vamos a utilizar.
Coger trozos pequeños de masa e ir haciendo la marcación con el molde y recortar los bordes uno a uno.
Dejar secar las galletas 24 horas en el frigorífico para que se sequen bien (esto puede variar dependiendo del grado de humedad). Una vez estén secas, hornear a 130ºC unos 10-15 minutos. Es muy importante que las galletas no crezcan antes de los 10 primeros minutos, si eso sucede, debemos bajar la temperatura del horno.
Una vez horneadas, dejar enfriar sobre rejilla.
Las galletas se pueden conservar hasta 3 meses en cajas de latón.