Con esta receta doy por concluida la época de helados. Y mira que hace calor como para seguir con ellos, pero he decidido sacar la cubeta de la heladera del congelador y darle un respiro.
Este helado es sencillo a más no poder, cremoso un rato y solamente lleva tres ingredientes. No hay excusa para no meterse en faena. Además no sale mucha cantidad, aunque se pueden doblar los ingredientes sin problema.
Tras el éxitazo del Helado de KitKat que duro un asalto, me pidieron más helado, y con tres ingredientes que tenía en casa ha surgido esta receta que merece la pena repetir.
Lo podéis hacer con o sin heladera, como todos los helados.
Ingredientes: (Para 500 ml de helado)
2 yogures griegos azucarados (250 gr)
200 gr de nata (crema de leche) para montar ( pero sin montar)
100 gr de regaliz rojo
Preparación:
Cortar el regaliz en trozos pequeños.
Calentar en un cazo a fuego suave la nata (crema de leche) junto con el regaliz, durante unos 5 minutos. El regaliz no se va a llegar a derretir pero quedará blando y le dará un color rosado a la nata (crema de leche).
Retirar del fuego y dejar que enfríe.
Mezclar con los yogures e introducir en la nevera durante una hora.
Mantecar en la heladera durante 15 minutos. Verter en un molde hermético y guardar en el congelador hasta el momento de servir.
Sacar 5 minutos antes de servir.
Sí lo hacéis sin heladera, tendréis que introducir la mezcla en el congelador e ir batiendo cada media hora durante dos horas. De todas formas es un helado super cremoso que no cristaliza.
A partir de ahora, y si no hay ningún contratiempo, publicaré martes y viernes, salvo los retos que lo haré en los días correspondientes al día estipulado. Mientras tanto seguiré compartiendo en Facebook recetas antiguas del blog, y los lunes y jueves las recetas de I Love Bundt Cakes.
También aprovecho para recordaros que seguimos de sorteo en I Love Bundt Cakes, no os olvidéis de cumplir todos los requisitos para poder acceder al sorteo de molde.
Feliz fin de semana.