Ingredientes:
8 huevos
colorante alimentario
agua mineral
sal
Preparación:
Ponemos a hervir agua con un poco de sal y cuando ésta hierba, añadimos los huevos que tendremos a temperatura ambiente, para que no se rompan con el contraste térmico.
Dejar cocinar los huevos entre 8 y 10 minutos dependiendo de su tamaño y asegurándonos de que no exceda este tiempo, para evitar el tono verdoso que a veces tiene la yema, debido al exceso de cocción, ya que libera el sulfuro de hierro y tiñe la yema.
Una vez transcurrido el tiempo, sacar los huevos, introducirlos en agua fría, (podéis poner hielo si queréis) y una vez bien fríos, pelarlos.
Escoger uno o varios colorantes alimentarios, mezclarlos con el agua, remover para que se reparta el color uniformemente, y sumergir los huevos enteros o partidos sin la yema y dejarlos hasta que estén con la intensidad de color que a vosotros os guste más.
Una vez conseguida la tonalidad que más os agrade, ya podéis proceder a rellenar los huevos con lo que más os apetezca o simplemente volver a poner las yemas a los huevos partidos por la mitad y abrir los enteros...quedan espectaculares y por poco dinero, tenéis un entrante o aperitivo espléndido y vistoso.
Vino recomendado:
Un blanco tipo, Vina Sol del Penedés de Cataluña, o un rosado tipo, Principe de Viana de Navarra.
Servir los dos vinos entre 6-8 grados.
Comentarios y consejos.
Si queremos sorprender a nuestros comensales, y servir unos huevos con todas las yemas en el centro del huevo, durante los 3-4 minutos iniciales, remover el agua de vez en cuando y así centraremos las yemas, durante el tiempo que tardan en cocinarse.
Para pelar los huevos fácilmente, hay que poner algo de sal al agua de cocción y por otro lado enfriar lo máximo posible los huevos una vez cocinados. Como peor se pelan es en caliente.
El colorante alimentario, se puede conseguir fácilmente en grandes superficies, en la zona de productos para elaborar pastelería casera. Sobre todo ahora que se ha puesto de moda hacer cupcakes, (las magdalenas de toda la vida, pero adornadas, típicas de EEUU).
No obstante, hay que vigilar que no haya alguien alérgico. Si es así, podemos teñir los huevos con productos naturales como, azafrán, cúrcuma, remolacha, frambuesas, arándanos, moras, fresas, cerezas, granadas, perejil, aguacate, pistachos, zanahorias. Tal vez los colores no sean tan intensos en algunos casos, pero el huevo al ser blanco y poroso, admite muy bien el tiente.