Los jugadores quedamos divididos en dos equipos. A uno de ellos les tocaron estos ingredientes: guindilla, cardamomo, café, canela y té verde. Al otro equipo nos tocaron éstos: manzana verde, miel, confitura de arándanos y bacon.
Me muero de ganas de saber qué ha salido de las cabecitas pensantes del resto de participantes y de sus cocinas :) Son los siguientes:
http://cocinaryacomer.wordpress.com
http://doctoracupcake.wordpress.com/
http://hoytapeo.com/
http://losdulcesdeligia.wordpress.com/
http://aventurasendelantales.wordpress.com/
http://picoteandoideas.wordpress.com/
http://thecookinglab.es/
http://lirioscake.com/
Pero ahora voy con mi receta. La verdad es que había visto alguna vez utilizar bacon en un postre, más exactamente en cupcakes (y en una tarta de pacanas de un concursante de Masterchef USA), pero no tenía ni idea de cómo sería cocinarlo para un postre ni mucho menos cómo quedaría.
También pensé que los sabores de estos 4 ingredientes juntos podrían resultar un poco agresivos, así que pensé en cómo suavizarlos intentando que no perdieran su personalidad. Así que me decidí por una mousse.
No las hago muy a menudo y la verdad es que no sé el motivo, ya que es una manera de acabar una comida que apetece un montón. Es más, cuando salgo, si hay mousse de postre es normalmente lo que cae.
Otra cosa que tengo que reconocer es que cada vez le cojo más el gusto a esto de usar manzanas ácidas para dulces. Las descubrí con la tarta Streusel de manzana y en esta mousse han quedado buenísimas. Y combinadas con el resto de sabores… ñam… :)
Lo que más me ha gustado de esta receta, eso sí, ha sido probar tres cosas que no había hecho nunca: una mousse de manzana (y ácida), los terrones de miel que os explico más abajo, y caramelizar bacon.
Bueno, acabo el rollo. Me pongo ya con la receta.
Ingredientes para 3:
Para la mousse:
- 2 manzanas Granny Smith
- 2 cucharaditas de azúcar moreno
- 2 nueces de margarina
- 100 gr de mascarpone
- 150 ml de nata (crema de leche) para montar
- 1 hoja de gelatina
- 2 cucharadas de azúcar glacé
- 1 cucharada de aroma de vainilla
Para el polvo de miel:
- 80 gr de mantequilla
- 160 gr de azúcar moreno
- 80 gr de miel
- 2 cucharadas de bicarbonato
Para el bacon caramelizado:
- 3 lonchas de bacon ahumado
- 2 cucharaditas rasas de azúcar moreno
Y además:
- confitura o sinfonía de arándanos
Preparación:
Lo primero es asar las manzanas. Para ello las descorazonaremos, les haremos unos cortes en la piel de arriba abajo, pondremos una cucharadita de azúcar moreno en el centro de cada una, una nuez de margarina encima y un poco de agua en el fondo de la bandeja donde las pongamos. Las llevaremos al horno precalentado a 200º C durante unos 30 minutos.
Cuando lleven unos 20 minutos haciéndose vamos preparando el resto de la mousse.
Ponemos a remojo la hoja de gelatina en agua fría.
En otro recipiente batimos bien el mascarpone con el azúcar glacé y la vainilla.
Montamos bien también la nata (crema de leche) y la dejamos en la nevera hasta el momento de usarla.
Cuando estén hechas las manzanas, las pelaremos y con una cuchara apartaremos la pulpa a un recipiente que podamos utilizar para triturarlas después con la batidora de brazo. Así que las trituraremos bien hasta que sean un puré fino.
Mientras el puré esté aún caliente, y si se ha enfriado lo ponemos un minuto al microondas, escurrimos la gelatina y la disolvemos en él. Ahora dejamos que se temple y cuando haya perdido el calor lo mezclamos con el mascarpone y lo dejamos aparte.
Ponemos ahora en cada recipiente en los que las vayamos a servir una cucharadita o dos de confitura de arándanos, dependiendo del ancho de la base.
Volvemos a la mousse. Antes de ponerla a enfriar, incorporamos la nata (crema de leche) a la mezcla de manzana y mascarpone, añadiéndola con una paletina de silicona con movimientos suaves para que mantenga el volumen. Después repartiremos esta mezcla en los recipientes donde las serviremos y lo llevamos a la nevera.
Vamos a por el polvo de miel. Esta receta la saqué de un programa de televisión de Lorraine Pascale (no aparece en el libro que ha salido hace poco a la venta). Son unos terrones de miel y azúcar que se pueden servir troceados o picados para adornar o acompañar postres o bebidas.
Para hacerlos necesitamos un cazo o cazuela grande, ya que la mezcla, si la hacemos bien, debería crecer bastante de volumen al cocinarla. Deberemos preparar también una bandeja que untaremos con un poco de aceite.
Así que ponemos a fuego medio en un cazo la miel, la mantequilla y el azúcar y lo dejamos hasta que se disuelva del todo y adquiera un color dorado intenso. Entonces subimos el fuego, añadimos el bicarbonato y batimos con un batidor de varillas unos segundos. Si lo hacemos bien veremos que crece y se hace una espuma de un color como de cerveza rubia. Entonces lo apartamos del fuego y lo extendemos en la placa que hemos engrasado anteriormente. Lo dejaremos enfriar y, cuando se solidifique, veremos que es muy fácil de romper con las manos. Podemos guardarlo como terrones en un recipiente hermético. Pero para esta receta tomaremos unos trozos y los picaremos. Tendremos una especie de azúcar molido con sabor a miel, que da un toque muy interesante sin hacerse empalagoso.
Finalmente prepararemos el bacon caramelizado. Para ellos cortaremos en porciones pequeñas las lonchas de bacon ahumado. Las llevaremos a una sartén antiadherente sin aceite y las tendremos hasta que empiecen a estar crujientes. Entonces les añadiremos el azúcar moreno y removeremos un poco hasta que se haga el caramelo (unos segundos). En ese momento apartaremos el bacon del fuego y lo pondremos a enfriar sobre papel vegetal. Quedará crujiente y dulce, con un suave sabor a bacon que, curiosamente, queda estupendo con la manzana.
A la hora de servir espolvorearemos con el polvo de miel y terminaremos la decoración con el bacon caramelizado.
Probadla, está riquísima ;)
¡Que aproveche!