Ya os comenté que la semana pasada fue mi cumpleaños, y ese día desayunamos unos ricos princess cupcakes, pero el fin de semana han seguido las celebraciones, que no todos los días se cumplen
Así que me auto preparé una tarta!! Como ya tenía en cuenta que mi papi iba a preparar una gran comida, opté por una tartita refrescante y poco empalagosa. En este caso, hice un super layer cake bastante altito, con fresas naturales y aromatizado con lima y con un delicioso frosting de crema de queso también aromatizada a lima que le da un saborcito fresquito ríquísimo! La verdad es que tuvo éxito y más de uno repitió (yo incluida) y podría ponerla en el top 3 de mis tartas preferidas desde ya!!
Ingredientes para el bizcocho:
(para 2 moldes de 15 cm)
- 5 huevos
- 300 gr. de azúcar
- 300 gr. de harina
- 1 sobre de levadura
- 175 ml. de aceite de girasol
- 8 fresas + 2 para decorar
- ralladura y zumo de 2 limas
Para la crema de queso a la lima:
- 200 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
- 200 gr. de azúcar
- 400 gr. de queso crema
- ralladura y zumo de una lima
Preparación:
Mezclar en un bol los ingredientes secos, ese decir, el azúcar, la harina y la levadura.
En otro bol mezclar los huevos y el aceite de girasol. Batir bien.
Mezclar después los ingredientes secos y los húmedos. Batir bien con varillas eléctricas si tenéis.
Añadir la ralladura y el zumo de dos limas y mezclar bien.
Lavar y cortar en trocitos las fresas frescas y añadirlas a la mezcla. Mezclar para que se distribuyan bien todos los trozos en toda la mezcla.
Cuando ya esté todo bien mezclado, engrasamos los moldes con spray dubhor para evitar que se pegue y vertemos la mitad de la mezcla en cada molde.
Precalentamos el horno a 180º. Metemos el bizcocho en el horno durante unos 45 minutos. Es muy importante no abrir el horno en todo el rato, vamos controlando por la ventana del horno pero no lo abrimos hasta el final. Cuando estén listos retiramos del horno y dejamos enfriar sobre una rejilla.
Para preparar la crema de queso batir la mantequilla pomada a velocidad alta durante unos 3-4 minutos junto con el azúcar como si fuéramos a hacer una buttercream. Añadir la ralladura y el zumo de lima y seguir batiendo hasta que os quede homogénea. Cuando el azúcar y la mantequilla estén completamente integrados añadimos el queso crema y batimos a velocidad baja para que no se nos deshaga hasta que se integre bien.
Vamos con el montaje de la tarta. Cada bizcocho lo dividimos horizontalmente por la mitad par crear dos bases de cada uno de ellos.
Colocamos el primer bizcocho sobre una base con papel de hornear en cuatro trozos que luego podamos retirar. Cubrimos el bizcocho con una capa de frosting de queso y encima otro bizcocho. Repetimos hasta acabar con el ultimo de los bizcochos. Este último bizcocho lo colocamos boca abajo porque normalmente será más lisito.
Con ayuda de una espátula forramos toda la tarta con una capa ligera de frosting de queso para que cubra bien todas las miguitas. Dejamos reposar un ratito en la nevera para que esta primera capa se endurezca.
Pasado ese rato le daremos una segunda capa de frosting de queso de acabado. Empezamos por la superficie de la tarta y vamos embadurnando también los laterales. Para dar el acabado lisito nos ayudaremos de una espátula que iremos mojando en agua caliente y secándola antes de pasar por la tarta para alisarla. Finalmente con la boquilla 1M realicé una decoración alrededor de la base de la tarta y sobre la capa superior también coronando la tarta.
Cuando la tarta ya está finalmente decorada con el frosting de queso, con cuidado retiramos el papel de hornear que habíamos colocado para no manchar la base.
Para finalizar decoré con unos confetti de colores en la parte superior de la tarta y unas perlitas de colores por los laterales y le añadí unas guirnaldas hechas con unas cañitas de colores y whasi tappe y un par de hermosos fresones.