Ingredientes:
250 gr de azúcar
150 gr de mantequilla
300 gr de harina
1 cucharada de esencia de vainilla
4 quesitos
4 huevos
Chocolate blanco
Serpentina de colores comestibles
Preparación:
Sacamos un bol grande y tamizamos la harina para que no queden “grumitos”. Una vez tenemos la harina tamizada la separamos en un bol y en otro recipiente añadimos la mantequilla pomada y el azúcar ( nos guardamos una cucharadita, ya os diré para que es jeje) y removemos a velocidad media hasta que el azúcar se integre bien, una vez todo bien mezclado añadimos los quesitos y volvemos a mezclar a velocidad media. Volvemos al bol en el que teníamos la harina tamizada, añadimos los huevos 1 a 1 para que se integren bien. Cuando tenemos las dos mezclas procedemos a mezclarlas.
Es la hora de calentar el horno, en mi caso puse a 200 grados. Mientras tanto vamos rellenando los moldes, en mi caso utilice unos del Lidl de la marca “Ernesto” que me regalo mi hermana y son unas tacitas de silicona monisimas.
… os acordáis de la cucharada de azúcar guardada?! Es la hora de usarla, una vez llenos los moldes espolvoreamos con un poco de azúcar cada uno, esto lo que hará es que las magdalenas estén un poco crocante al morderlas y den un mejor aspecto.
La hora de meterlas al horno, bajamos temperatura a 180grados arriba y Abajo durante 25 minutos.
Las sacamos con cuidado de no quemarnos y dejamos enfriar.
Hora de decorar, yo las decoré con un poco de chocolate blanco derretido y unas serpentinas comestibles de colores.
Y… a disfrutarlas!!!