Ingredientes:
210 gramos de harina de trigo
175 gramos de azúcar
190 gramos de aceite de girasol
60 gramos de leche
3 huevos medianos
10 gramos de levadura química
Ralladura de 1 limón
Un pellizco de canela en polvo
Un pellizco de sal
Preparación:
Pondremos en un bol la harina, la levadura, la canela y la piel de limón. Con ayuda de una espátula mezclamos y reservamos.
En otro bol, echamos los huevos y el azúcar y batimos hasta que la mezcla haya blanqueado (aumenta mucho de volumen y queda como una crema.). Vertemos la leche, el aceite y la sal. Batimos con las varillas durante un minuto.
A esta mezcla añadimos la harina y mezclamos hasta que todos los ingredientes estén bien integrados (personalmente prefiero mezclar con una espátula para no sobre batir la masa con la harina y quitarle así el aire que ha adquirido al batir el resto de los ingredientes).
Vertemos la mezcla en un recipiente y tapamos con un bol y reservamos en la nevera (unas horas o bien toda la noche, no hay problema por que esté más tiempo refrigerada)
Precalentamos el horno a 250º, opción arriba y abajo.
Sacamos la masa de la nevera y batimos con unas varillas. Ponemos las cápsulas de magdalenas en un molde para ello y rellenamos las 3/4 partes de cada una. Sobre ellas, pondremos azúcar como si salásemos la comida, para que quede en el copete.
Introducimos en el horno y bajamos la temperatura a 210º. Horneamos durante 14 minutos, hasta que las veamos doradas.
Veréis que son unas magdalenas deliciosas! Os las recomiendo.
Y este es el resultado. Espero que os animéis: