Para Damián, porque fue visitando su blog cuando pensé en abrir el mio. Porque me enseñó a querer a su tierra, Asturias, y desde entonces la siento mucho más cercana. Espero que tengáis una muy buena cosecha de manzanas y mejor sidra amigo mio.
Es bella, dulce, e inspiradora. Dueña y protagonista de tartas y compotas e imprescindible en muchas mermeladas. Vuelve cada otoño, justo cuando la naturaleza se nos presenta en toda su gama de colores. Actúa de invitada en algún cuento, y resulta apetecible a todas horas. Envuelta en una suave capa de caramelo resulta toda una tentación.
La manzana caramelizada (candy apple) suelen venderla en las ferias de pueblo, por lo cual es archiconocida. No debemos confundirla con la manzana dulce (caramel apple). Las dos preparaciones son dulces, como es evidente, pero la primera (de origen norteamericano), va recubierta con una capa fina de caramelo crujiente teñido de rojo, mientras que la segunda se recubre de un caramelo más cremoso, similar al toffee, Por lo general se adorna con crujientes de frutos secos, chocolate, etc.. Estas última son originales de Reino Unido, Irlanda, Canada y también de EEUU. Se preparan principalmente la víspera de Todos los Santos.
Ingredientes para 6 manzanas mini variedad Red Love
6 manzanas dulces
200 g de azúcar blanca
50 g de glucosa
El zumo de 1/2 limón
50 ml de agua mineral
Colorante rojo o Jarabe de grosella
Para 4 manzanas Golden o Reineta grandes
4 manzanas
400 g de azúcar blanca
100 g de glucosa
El zumo de 1 limón
100 ml de agua mineral
Colorante rojo o Jarabe de Grosella
- Lavar y secar bien las manzanas. Quitar el rabito. Pinchar el palo para brocheta por el lado del rabito hasta más o menos la mitad.
- Guardar en la nevera hasta su utilización. Cuanto más frías estén mejor.
- Poner una bandeja plana en el congelador. Necesitaremos una base muy fría para apoyar las manzanas una vez caramelizadas.
- Introducir todos los ingredientes en un cazo hondo en el siguiente orden: Azúcar, zumo de limón, agua, y glucosa. Mezclar bien y añadir el colorante.
Si deseáis que la mezcla resulte de color rojo usad colorante alimenticio. Si queréis obtener un rojo como el de las manzanas de feria podéis añadir, al colorante líquido, otro colorante rojo en polvo; de venta en establecimientos especializados en pastelería. Yo he usado tres cucharadas de jarabe de grosella que tengo en casa para cuando hacemos los panellets, y unas gotas de colorante alimenticio. No resulta tan rojo pero no influye en la textura del caramelo.
Llevar a ebullición, a fuego medio, durante 10/12 minutos aprox. (Para las manzanas grandes unos 15 mimutos). Remover con un pincel de cocina de vez en cuando. Hay que tener cuidado para que no salpique.
Poco antes de terminar ya podéis sacar la bandeja del congelador. Poner un papel sulfurizado encima. Echar unas gotas de aceite de girasol y extenderlo.
Ahora es cuando viene lo más complicado porque es difícil explicar el punto del azúcar.
Si el caramelo no está lo bastante espeso, y las manzanas no están frías, pasa esto. Y si nos pasamos de cocción se nos quema.
Una prueba fácil es coger el caramelo con una cuchara sopera y levantarla. Si veis que el caramelo resbala poco a poco y que en la cuchara queda una capa pegada, tanto por delante como por detrás, es que el caramelo ya está listo. No lo dejéis más tiempo en el fuego porque pasar del rojo al "Ahhh!, que se me ha quemado!.. Solo es cuestión de segundos.
- Cuando el caramelo deje de hervir, esperad unos segundos antes de introducir la manzana. A continuación sacar una manzana de la nevera. Volcar el cazo de lado y pasar la manzana por el caramelo, rotando sobre si misma, para que el caramelo la vaya envolviendo. Escurrir un poco y colocar en la bandeja.
- Hacer lo mismo con las demás manzanas.
Manzana Red Love, de carne rosa. La envoltura de caramelo debe ser delgada pero suficiente.
Puede resultaros útil:
Armaros de paciencia, no sale a la primera.
Hay que dejar enfriar el caramelo, antes de consumir, hasta que enfríe del todo y tenga una textura crujiente. Mejor hacerlas de un día para otro.
Conservar tapadas con papel de celofan o aluminio sin que éste toque la superficie.
Es preferible no hacer una capa muy gruesa de caramelo porque resultaría muy dura para los niños.
Si en vuestra cocina hace calor, es preferible guardar las manzanas caramelizadas en la nevera.