Me encantan las conservas de pescado.
El atún, las sardinas, los mejillones.. estos último me gustan especialmente, ¡soy una forofa de los mejillones en escabeche! Por eso cuando vi esta receta de Recetas de Rechupete no dudé ni un momento en hacerlos. Y claro comérmelos, que atracón me di...
INGREDIENTES:
1 kg de mejillones frescos
160 ml de vino blanco
110 de vinagre de vino
50 ml de aceite de oliva
2 dientes de ajo
3 hojas de laurel
1 cucharada de pimentón
PREPARACIÓN:
Primero debemos lavar muy bien los mejillones para quitar de la cáscara cualquier resto se suciedad o las "barbas" del mejillón.
Los ponemos en una olla con el vino y dos hojas de laurel. Ponemos a fuego fuerte unos dos minutos y tapamos para generar vapor y que se abran .
Desechamos los que no se hayan abierto y vamos sacando la carne de las cáscaras y poniéndolas en el recipiente donde después los vamos a conservar. El caldo que ha resultado de la cocción lo colamos y reservamos.
Ahora vamos con el escabeche. En una olla ponemos el aceite a calentar y doramos los dientes de ajo. Cuando estén dorados, apartamos un momento del fuego y añadimos el pimentón, removiendo con una cuchara de madera. Volvemos a poner al fuego agregando el vinagre, medio vaso del caldo de la cocción de los mejillones y la hoja de laurel que nos quedaba. Dejamos que hierva un minuto y apartamos del fuego. Cuando esté frío cubrimos con este escabeche los mejillones que habíamos reservado en un tarro.
Dejamos reposar unas horas y listos para consumir. Un consejo, para que los mejillones se conserven perfectamente deben estar completamente cubiertos por el líquido del escabeche.
También podéis ver esta receta en mi canal de Youtube, y si os gusta, suscribiros para ver las novedades.
Cocemos los mejillones bien limpios con el vino y las dos hojas de laurel.
Vamos quitando las ´cascaras y poniendo la carne en el tarro donde vayamos a conservarlos.
Colamos el liquido de la cocción y reservamos.
Vamos con el escabeche. Doramos los ajos a rodajas.
Apartamos del fuego y añadimos el pimentón, vinagre, caldo de la cocción y laurel.
Cuando el liquido del escabeche esté frío, lo añadimos al tarro donde estaban los mejillones. Dejamos que reposen unas horas.
¡Y listos! una tapita la mar de rica.
Para acompañar no puede faltarnos la cervecita o el tinto de verano y el aperitivo está servido.