Para que disfrutéis de la vida en silencio, os dejo con esta deliciosa receta que os dejará sin palabras, no sólo por lo largo del nombre, je, je...
NIDOS DE PASTA KATAIFI CON PURÉ DE PATATA
AROMATIZADO CON POLVO DE TRUFA NEGRA, ALCACHOFA,
HUEVO ESCALFADO DE CODORNIZ Y SAL DE JAMÓN IBÉRICO
Ingredientes para 2 personas:
PARA LOS NIDOS:
Pasta Kataifi; 1 cucharada de mantequilla;
PARA EL PURÉ DE PATATA:
1 cebolleta; 1/2 l de agua; 1 hueso pequeño de jamón; 1 patata; Trufa en Polvo;
Aceite de Oliva.
PARA LAS ALCACHOFAS:
4 alcachofas; 1 limón; Agua; Sal
PARA LOS HUEVOS ESCALFADOS:
4 huevos de codorniz; Agua; Papel film; Sal; Aceite de Oliva.
PARA LA SAL DE JAMÓN IBÉRICO:
1 loncha fina de jamón ibérico; 1 trozo de papel vegetal.
Comenzamos preparando los nidos de pasta kataifi. Para ello cogemos unas tiras más o menos gruesas y las enrollamos formando el nido. Los ponemos en un molde para magdalenas o similar y las pintamos con mantequilla derretida. Horneamos a 220º durante 10 minutos aproximadamente o hasta que hayan adquirido un tono dorado. No es necesario usar papel vegetal, ya que la pasta kataifi no se pega. Desmoldamos una vez frías y reservamos.
El siguiente paso será elaborar el puré. Para ello, en un cazo ponemos la cebolleta troceada muy fina a pochar con una cucharadita de aceite de oliva, cuando esté transparente añadimos el agua y el hueso de jamón y dejamos cocer a fuego suave. Es importante limpiar el caldo de impurezas. Pasados unos 10 minutos, añadimos la patata lavada y cortada en rodajas finas, algo de sal y dejamos que se cueza. Cuando esté blandita pasamos por la batidora para obtener nuestro puré. Si hubiese demasiado líquido retiramos parte. Es mejor ir añadiendo poco a poco, pues queremos un puré espeso. Cuando el puré esté listo y sin grumos, añadimos la trufa en polvo y un chorrito de aceite de oliva. Removemos bien y reservamos.
Para cocinar las alcachofas las limpiamos bien quedándonos con los corazones. Las restregamos con medio limón para evitar que ennegrezcan y las cocemos en una olla con agua y sal durante 6 minutos. Una vez listas, escurrimos y reservamos.
Es el momento de pochar los huevos, para ello, cogeremos un bol y lo cubrimos con un trozo más o menos grande de papel film, ponemos un chorrito de aceite para que no se pegue el huevo y añadimos el huevo con cuidado de no romperlo con una pizca de sal. Cerramos el film hasta formar un paquetito (debe quedar bien cerrado) repetimos esta operación con los 4 huevos.
En un cazo ponemos agua a calentar y con ayuda de una espumadera removemos bien el agua antes de que rompa a hervir. Añadimos los huevos y dejamos que se cocinen unos dos minutos, hasta que veamos que la clara se cuaja (es importante no dejarlos demasiado porque queremos que la yema quede líquida y el huevo es pequeño y se cocina rápido). En ese momento sacamos del agua con ayuda de una espumadera y rompemos el paquetito con mucho cuidado para sacar los huevos.
Por último elaboramos la sal de jamón. Cubrimos un plato con papel vegetal y ponemos encima la loncha de jamón. Metemos al microondas un minuto aproximadamente (ojo porque se quema si lo metemos demasiado tiempo), sacamos del micro y dejamos enfriar. El jamón debe quedar crujiente, si no es así, lo metemos otros 30 segundos. Troceamos la loncha y la ponemos en el mortero. Trituramos hasta obtener nuestra sal de jamón con el grosor deseado.
Procedemos ahora al montaje del plato. Es importante que todos los ingredientes estén templados tirando a calientes, excepto los nidos de kataifi que pueden estar fríos. Espolvoreamos el plato a servir con sal de jamón a modo decorativo, encima ponemos los nidos de kataifi, dentro de ellos una cucharada de puré de patata,encima la alcachofa que espolvorearemos con más sal de jamón y regaremos con un poquito de aceite y un poco de sal Maldon. Terminamos el plato coronando los nidos con los huevos escalfados y espolvoreados con más sal de jamón.
Aunque parece un plato complejo, es bastante sencillo. Reconozco que al llevar varias preparaciones por separado es algo laborioso pero merece la pena el resultado y la combinación de sabores y texturas es espectacular.
Para los que no conozcáis la pasta kataifi, se elabora con los restos de la pasta filo y es una pasta con forma de madeja de hilo muy utilizada en la repostería árabe principalmente. Era bastante difícil de encontrar pero ahora la venden en Alcampo. Os recomiendo probarla, pues da mucho juego y ofrece una textura muy interesante tanto para platos dulces como salados y a la vez es mucho más ligera que la pasta de hojaldre o la quebrada. Además, se cocina muy fácilmente, ya que como os he dicho antes no se pega al molde, lo que además es mucho más limpio a la hora de fregar.
Que no os asuste el eterno nombre de la receta. En realidad se trata de un delicioso aperitivo que además es muy, muy vistoso.
¡Hasta el próximo post!