Esta es sin duda la receta de las que mas me avergüenzo de mi vida, no os imagináis lo mal que salió, y si, la pinta ya no es buena, pero os aseguro que el resultado era peor aun, un despropósito de errores que no se ni donde empiezan y solo os la enseño porque con ella cumplo con el desafió del mes de noviembre y es que no quería fallar porque ya he fallado en el primero y esta sería una segunda falta cuando hace nada que ha empezado el curso. Al tercero vas fuera, así que… por eso os enseño “esto” y de verdad que os pido perdón y me comprometo a repetir hasta que me salgan en condiciones.
Os doy la receta, que a mi no me ha salido (no recuerdo donde la cogí, la tenía apuntada ya hace tiempo)
Ingredientes; 300 gr de patatas, 175 gr de espinacas, 1 cucharada de aceite, 1 yema, 125 gr de sal y pimienta.
La salsa es este concentrado de tomate que me encanta, pero que me dio por hacer con tomate triturado y tampoco quedó bien…. en fin.
Cocemos las patatas y salteamos las espinacas.
Hacemos un puré con las patatas, lo mezclamos con las espinacas troceadas y con el resto de ingredientes. Se supone que obtenemos una masa que no se pega a las manos con la que hacemos unos rulos y luego vamos cortando trozos y marcándolos con el tenedor para darles forma.
Finalmente los cocemos con agua hirviendo y cuando salgan a flote los retiramos e inmediatamente los salteamos con la salsa.
Mis problemas? no se, tal vez la patata que cogió mucha agua, pero mi masa se pegaba muchíiiiiiiiiiiiiiisimo, yo añadía harina una y otra vez y nada, me peleé con ellos para poder hacerlos y finalmente el sabor era que ni fu ni fa, pesados y con poco sabor….
Yo había preparado Ñoquis en otra ocasión y habían salido riquísimos, por eso no me esperaba este estrepitoso fracaso…. en fin, que de nuevo mil perdones por esta receta, traeré en cuanto pueda otra para resarcirme.
Y ahora si queréis ver recetas de ñoquis DE VERDAD podéis pasar a ver las maravillas que han preparado mis compañer@s