Este mes viajamos con el Reto Reposteras por Europa al Reino Unido, destino que le tocó elegir a Noemí de Todo Cooking. Ya sabéis que somos un grupo de blogueras y blogueros que viajamos virtualmente cada mes a un país diferente de Europa y cada uno de nosotros muestra algo característico de la repostería de ese lugar. Todo ello conducido y organizado de una manera impecable por Pili de Tothom a la Cuina.
Hacía mucho tiempo que quería probar a hacer esta clásica crema inglesa, sobretodo después de haber hecho su versión con limón, el Lemon Curd que ya os mostrara hace unos meses y dicho sea de paso, más consumida y utilizada en repostería que el Orange Curd. Así que como sabía que tenía un lugar donde encontrar la receta y acertar seguro, me decanté este mes por esta maravilla de origen inglés.
Y el lugar que os comentaba donde sabía que solo había cosas ricas y genialmente explicadas y presentadas, era el de mi querida amiga y compañera bloguera Bea, del blog Bea, recetas y más. De su blog ya saqué en su momento la receta de Lemon Curd y alguna que otra receta más y es que me encanta todo lo que hace y con el cariño con que lo hace. Y no, aunque ahora nos una la amistad y pueda parecer que lo esté diciendo por ese motivo, antes de eso, mucho antes, yo ya admiraba su trabajo
Como os decía antes, el Orange Curd es una crema de origen inglés a base de fruta, azúcar, mantequilla y huevos, ingrediente este último que hace que su caducidad sea mucho más corta que la de una mermelada por ejemplo, de hecho es recomendable consumirla en los tres o cuatro días siguientes a su elaboración. Es una crema que sirve tanto para tomarla con pan o Scones, como hacen en todo el Reino Unido, como para utilizarla como relleno de tartas, bizcochos o magdalenas. A mi personalmente me gusta más el Lemon Curd, de hecho diría que es adictivo, de esas cosas que empiezas a comer y por algún extraño motivo te pasas por alto el típico “este es el último trozo” una y otra vez. A mi es que me pasa que en estos casos se me anula por completo la voluntad
INGREDIENTES:
60 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
100 gr. de azúcar
medio limón
2 naranjas
2 huevos
ELABORACIÓN:
Lavamos bien las naranjas y rallamos solo la parte de la cáscara que es naranja, el resto de pulpa blanca la retiraremos porque de lo contrario aportará un sabor amargo a nuestra crema.
Exprimimos las naranjas y el limón y reservamos.
Batimos los huevos con el azúcar y con la mantequilla hasta que estén integrados y obtengamos una crema. Añadimos ahora la ralladura de naranja y el zumo que teníamos reservado y removemos bien hasta que se integren en la mezcla.
Lo vertemos todo en un bol o cazo y lo ponemos al baño maría a fuego lento, removiendo continuamente con unas varillas de mano hasta obtener una crema lisa y ligeramente espesa, durante aproximadamente 15 ó 20 minutos.
Ahora tienes la opción de dejar la crema sin colar o pasarla por un colador o chino para retirar los restos de la cáscara de la naranja si quieres obtener una crema completamente lisa. En mi caso os cuento que el Lemon Curd lo dejé sin colar y quise hacer esta vez la prueba colando la naranja y particularmente me ha gustado más sin restos de cáscara. El resultado es una crema de una textura y suavidad increíbles. Aunque por supuesto que sin colarlo queda igualmente maravillosa.
ALGUNAS ACLARACIONES:
Si quieres hacerlo en la Thermomix, Bea te enseña a hacerla también en su blog. Pincha aquí para verlo.