De hecho en casa no duró ni cinco minutos después de ponerla en la mesa, en la previa de la comida. Donde vivo (Islas Canarias) no es demasiado habitual este tipo de producto. Al contrario que en la Península Ibérica, donde las tapas de orejas de cerdo o el empleo de este apéndice es habitual en guisos o potajes, en Canarias no se utiliza demasiado. Eso no quita para que vayamos probando siempre cosas nuevas y que, cuando lo hacemos, acertemos en ocasiones con el producto “desconocido”. Este fue el caso ya que la Oreja de cerdo en adobo y frita es un auténtico manjar.
Oreja de cerdo en adobo y frita
Ingredientes:
Una oreja de cerdo
Cinco o seis cabezas de ajo
Pimentón dulce
Una hoja de laurel
Unos granos de pimienta
Una rama de tomillo
Pimienta cayena
Flor de sal negra
Preparación:
Con la ayuda de un soplete de cocina eliminamos los restos de pelos e impurezas de la oreja. Luego lavamos bien
La ponemos a hervir durante una hora u hora y media en abundante agua con sal
Pasado este tiempo la llevamos a un recipiente amplio
Le añadimos dos cabezas de ajo peladas y los ajos vistos o con camisa y otras dos o tres enteras
Añadimos también la hoja de laurel, los granos de pimienta, la rama de tomillo, la pimienta cayena y el pimentón dulce
Agregamos tres cucharones del agua de cocer la oreja y cubrimos con agua del grifo
Dejamos toda la noche en este adobo
Cuando la vayamos a hacer, tomamos la oreja y la secamos bien
La cortamos en trozos de bocado, la enharinamos, le quitamos el exceso de harina y la freímos en abundante aceite bien caliente
Cuando estén doradas, las retiramos sobre papel absorbente
A la hora de servir, las espolvoreamos con Flor de Sal Negra (u otro tipo de sal gruesa) y a disfrutarla
Mira en vídeo cómo se hace esta Oreja de cerdo en adobo y frita:
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