Son mucho mas saludables ya que están hechos directamente con el puré del tubérculo, sin ninguna harina añadida y son horneados.
Les confieso que la yuca nunca ha sido santo de mi devoción!!! la verdad es que de niña la odiaba y de mayor sigo sin tenerle demasiado aprecio… nunca le he encontrado un sabor o textura que me termine de agradar. Acá en Venezuela es común comerla solamente cocida en agua o posteriormente frita, y de ninguna de las dos maneras me emociona; así que me empeñe en ver de que forma podía consumir de vez en cuando este tubérculo, para variar un poco mi muy apreciada y consumida batata. Y se me ocurrió hacer estos palitos con especias, pimienta negra y queso rallado… y BINGO!!! encontré mi receta perfecta para consumir yuca. Así que se las comparto para que la prueben y si nunca han consumido yuca, pues esta es una buena excusa.
INGREDIENTES
2 Trozos de yuca medianos
2 huevos
sal y pimienta negra
orégano seco
1/2 taza de queso rallado finamente (parmesano, pecorino, queso de año, o cualquier otro queso de sabor intenso)
aceite de soya o girasol
Debemos comenzar por poner a cocer en agua la yuca. Para ello primero le retiramos con ayuda de un cuchillo la corteza o piel, la lavamos bien, la cortamos en trozos como de 7 cm y la llevamos a una olla con abundante agua. Una vez que comienza el hervor, comenzamos a contar 25 minutos y la dejamos cocinar tapada. Al cabo de este tiempo, debe estar ya suficientemente blanda y verse blanca. La retiramos del fuego, escurrimos y esperamos un par de minutos.
Si no se han abierto ellas solas, cortamos cada trozo a lo largo y le retiramos una vena fibrosa que tiene este tubérculo en el centro. Una vez retirado, con un aplastador para puré, comenzamos a aplastarla y triturarla lo mas que podamos. Agregamos a este puré que estamos haciendo, 2 cdas de aceite para que sea mas fácil aplastarla. Es importante que sepan que no va a quedar sedosa como un puré de papas. Este va a ser un puré bastante rústico y grueso.
Una vez que la hemos triturado, esperamos a que se enfríe y sazonamos con sal, pimienta negra, orégano seco y el queso. Se amasa con las manos y probamos para rectificar los sabores antes de agregar el huevo, y ver si es necesario añadir mas cantidad de algún condimento. Batimos los dos huevos y los incorporamos. Con una espátula integramos todo y con las manos engrasadas, formamos los palitos o dedos de yuca.
Los colocamos en una bandeja de horno engrasada y los horneamos a 170°C por 20 o 25 minutos, hasta que se vean dorados por fuera.