Tengo en casa dos hermosas calabazas para utilizar en diversas elaboraciones, esta es la primera de ellas, un pan tierno y jugoso de textura suave y esponjosa que recuerda a los panecillos de leche, verdaderamente maravilloso. Para una fan incondicional de la calabaza como lo soy yo (prueba de ello es que tengo varias recetas publicadas en el blog) este pan es una auténtica delicia. La calabaza posee un sabor muy agradable, suave y ligeramente dulce, debido a esto queda de lujo en todo tipo de preparaciones, tanto dulces como saladas.
Mi intención era publicar este pan de calabaza ayer para celebrar el Día mundial del pan, pero las cosas no salen siempre como una quiere y los planes se tuercen, no pasa nada, simplemente hay que adaptarse y hacer lo que toca en cada momento.
A los que sois muy amantes de los dulces os diré que este pan no lo es en exceso, todo lo contrario, en casa me han dicho que haga otro un poco más dulce la próxima vez. Si queréis un pan dulce es cuestión de añadir azúcar (al gusto) además de la miel que he puesto yo.
Preparé la masa para hacer una bolla de pan, a la hora de darle forma la dividí en dos partes, con una mitad hice una bolla mediana y con la otra parte 6 bollitos, siempre me sucede lo mismo y no tengo remedio, cambio de idea a medida que voy haciendo las cosas.
He cocido 1 kg de calabaza, en esta receta solamente necesitamos 200g de puré, el resto lo tengo reservado en el frigorífico para la siguiente, trabajo que está adelantado.
PAN TIERNO DE CALABAZA
INGREDIENTES:
200g de puré de calabaza
100ml del agua de cocción de la calabaza templada
500g de harina de fuerza
30g de levadura fresca de panadería
75g de miel
PREPARACIÓN:
Después de pelar la calabaza cocerla en agua hasta que esté tierna, 15/20 minutos aproximadamente. Escurrirla y reservar 100ml del agua de cocción. Aplastarla con un tenedor y dejar enfriar.
En el recipiente de la amasadora echar la harina, la miel y el puré de calabaza.
Disolver la levadura en el agua templada y agregarlas al resto de ingredientes.
Amasar 15 minutos con dos intervalos de 5 minutos durante el proceso: amasar 5 minutos y reposo de otros 5 hasta agotar el cuarto de hora.
Formar una bola con la masa y ponerla en un recipiente enharinado. Tapar con un paño limpio, o film transparente, y esperar a que duplique su tamaño de 1 a 3 horas (depende de la temperatura ambiente).
Desgasificar pasado el tiempo de levado y formar el pan/panecillos, colocarlo sobre una fuente de horno forrada con papel vegetal y hacer unos cortes en la superficie al gusto. Esperar de nuevo hasta que duplique su volumen.
Colocar un recipiente con agua, debajo de la rejilla donde se va a cocer el pan, para crear humedad y precalentar el horno a 190/200º.
Tiempo aproximado de horneado (puede variar dependiendo de cada aparato): 30/40 minutos si se trata de un solo pan con toda la masa y 10/15 minutos si son piezas pequeñas.
Retirar y dejar enfriar sobre una rejilla.
La fiesta de Halloween está a la vuelta de la esquina ¿Queréis sorprender a todo el mundo? Este pan tierno de calabaza es una fantástica idea, combina estupendamente con lo dulce y lo salado.
Hacer pan casero es una verdadero placer, atreveros a prepararlo vosotr@s mism@s hay un montón de variedades para elegir, a mi amiga Adela también le encanta hacer panes, como muestra os dejo esta ricura “Pan integral con salvado de trigo”.
Para desayunos, meriendas y postres también podéis optar por un “Pastel de calabaza asada con almíbar de canela”.
Que aproveche!!!
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