Hacer Pasta Fresca al huevo en casa es mucho más fácil de lo que creemos, y el resultado nada tiene que ver con la pasta seca convencional. Una vez hemos mezclado los ingredientes los dejamos reposar como mucho una hora, y a darle forma a nuestra pasta fresca. Tallarines, lacitos…después de unos minutos de coccción la tendremos lista para comer con nuestra mejor salsa.
Hoy nos hemos animado a preparar una versíon coloreada de la clásica Pasta fresca al huevo que os enseñamos a hacer hace un tiempo. Con un poco de tomate concentrado conseguimos este color tan bonito y un aporte extra de nutrientes. Bueno que, ¿Os animáis?
Pasta fresca de tomate
? Preparación: 1h 30
? Raciones: 2
? Dificultad: media
Ingredientes
200 gr harina común
1 huevo grande
50 gr concentrado de tomate
2 cucharadas de aceite de oliva
sal
Receta
En un cuenco amplio ponemos la harina y hacemos un agujero en medio. Ponemos el aceite, el concentrado de tomate y el huevo. Con las manos empezamos mezclando los ingredientes centrales con la harina de alrededor. Poco a poco iremos recogiendo más y más, hasta que esté toda integrada. Cuando la masa sea manejable, la vamos a trabajar bien sobre la encimera durante unos 10′. Si tenemos amasadora o panificadora este trabajo nos lo ahorramos.
El resultado debe de ser una masa dura que no se pegue en las manos. Rectificamos con harina si después de trabajarla bien sigue pegajosa, o con agua si por el contrario vemos que se nos desmenuza.
Una vez lista dejamos reposar la masa a temperatura ambiente de 30′ a 1h. Para ésto la ponemos en un bol engrasado y la tapamos con film.
Ya la tenemos preparada para usar. La extendemos sobre una superficie enharinada y la cortamos como nos interese. En este caso vamos a hacer tallarines. Para hacerlos todos de una vez lo haremos de la siguiente manera. En primer lugar hay que estender la masa todo lo posible, que quede muy finita. Vamos levantando la masa de la mesa y enharinando para evitar que se nos pegue. Cuando esté bien estirada ponemos un poco de harina por encima y doblamos por la mitad, y después de nuevo harina y doblar a la mitad. Así hasta tener la masa como vemos en las fotos. Ahroa a cortar “lonchas” con el cuchillo del ancho que queramos. Deshacemos cada una una de ellas para sacar el tallarín.
Para cocerla tendremos en cuenta el grosor de nuestra pasta. Unos tallarines finos tardarán unos 4-5′. Lo más fácil es probarlos para comprobar que no saben a harina, lo que indica que están cocidos. Si no es así cocemos algún minuto más.
Y listo!!! ¿Con que salsa os apetecen?
Notas:
Si nos sobra algo de masa, la podemos congelar antes de cocerla. Le damos la forma que queramos y la metemos en un recipiente al congelador. Éso es mejor que conservarlo en la nevera, porque por un lado, tiene huevo fresco, así que se nos estropeará pronto, y por otro, la masa tiende a oscurecerse…
Cuando lo saquemos del congelador no hace falta esperar a que se descongele, se mete directamente en el agua hirviendo.
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