Para todos aquellos que ya estén haciendo la operación bikini mejor que no sigan leyendo, o si no haced click en añadir a favoritos para cuando queráis daros un capricho dulce y probar esta tarta tan buena. Para todos los demás, os presento un pastel de chocolate y mandarina que crea auténtica adicción, si tenéis invitados o sois los responsables del postre en algún sarao, esta receta no tiene ninguna complicación y tiene un resultado espectacular. ¡No me enrollo más y vamos con la receta!
Ingredientes para el bizcocho175 gr de azúcar blanco
175 gr de mantequilla
3 huevos batidos
175 gr de harina de fuerza tamizada
2 cucharadas de cacao en polvo tamizado
2 cucharadas de leche
3 cucharadas de zumo de mandarina
la ralladura de una mandarina
Ingredientes para el glaseado
175 gr de azúcar glasé
2 cucharadas de zumo de mandarina
un poco de chocolate fundido
Lo primero que haremos será forrar con papel de horno un molde redondo desmontable de unos 20 cm de diámetro y precalentar el horno a 190ºC.
Batimos el azúcar con la mantequilla hasta obtener una crema ligera y esponjosa. Después vamos incorporando los huevos mientras batimos al añadir cada uno, incorporamos la harina también.
Dividiremos en dos partes iguales la mezcla, en una de ellas añadimos el cacao en polvo y la leche, mezclamos bien; y en la otra añadimos el zumo y la ralladura de mandarina, mezclamos bien también.
Vertemos varias cucharadas alternas de cada parte en el molde hasta echar toda la masa, removemos con un pincho de cocina para mezclarlo muy ligeramente y así tener un efecto marmolado. Metemos el pastel en el horno y lo cocemos durante unos 25 min a 190ºC o hasta que esté esponjoso al tacto. Siempre recomiendo pinchar con un palo de cocina y retirar el pastel del horno si el pincho sale seco.
Dejamos el bizcocho enfriar durante unos minutos en el molde y después lo sacamos a una rejilla para que termine de enfriarse.
Para hacer el glaseado vamos echando zumo de mandarina en el azúcar glasé mientras mezclamos y cuando nos quede una pasta suave (no líquida) ya la podemos extender sobre el pastel. Una vez que cuaje podemos decorar con el chocolate fundido.
¿Os animáis a probarla?