Con esta receta los niños se comerán la piña sin rechistar y a los mayores les parecerá una deliciosa forma de acabar una comida.
INGREDIENTES:
-1 piña bien madura.
-Azúcar.
-Menta, frambuesas o lo que te guste para decorar.
PREPARACIÓN:
Pelar la piña. Cortarla en rodajas de 1,5 cm. aproximadamente y quitarle el centro duro.
Poner al fuego una sarten amplia con 2 cucharadas de azúcar y colocar encima 3-4 rodajas de piña dejar cocer la piña con el azúcar 5 minutos por cada lado a fuego medio.
Después subir el fuego y dejar que el azúcar coja un poquito de color dorado y se adhiera a la piña caramelizandola.
Sacar a un plato y poner la siguiente tanda. La segunda tanda y las siguientes, pondremos solo 1 cucharada de azúcar en la sarten por que quedan restos de las anteriores. Añadir otras 3-4 rodajas de piña y repetir todos los pasos hasta acabar con todas las rodajas.
*Tienes que tener precaución para que el azúcar no se queme en ningún caso, apenas coge un ligero color dorado, apartar del fuego sacar las rodajas y empezar con la siguiente tanda, al poner las rodajas de piña que tienen agua ayudaran a que el azúcar se vuelva a disolver y no se queme