En esta ocasión me he complicado muy poco la vida para acompañar de un aperitivo una cemita de calabaza, zanahoria y calabacín que tengo para cenar.
Ingredientes (18 pinchos):
9 rebanadas de pan
14 gambas cocidas saladas, si son 18 mejor, pero no tenia más…
5 huevos de codorniz
12 aceitunas rellenas
1 tomate maduro
Aceite de oliva
18 palillos
Preparación:
En primer lugar cortaremos 9 rebanadas de pan igualitas (yo uso el corta fiambres que va de muerte para cortar el pan), vale un cuchillo de sierra.
En Cataluña es habitual untar el pan con tomate maduro y un chorrito de aceite, la verdad, así me gusta más, pero como hay que ahorrar, en lugar de eso, últimamente acostumbro a trocear un tomate maduro, lo meto en el vaso de la batidora con un generoso chorro de aceite y sal (en este caso sin sal, que las gambas ya son saladas), triturándolo y después recubriendo las rebanadas de pan con ese mejunje, con la ayuda de una cucharada sopera.
A continuación pelamos las gambitas.
Cocemos los huevos de codorniz.
Después cortamos cada rebanada por la mitad con un cuchillo y distribuimos entre ellas los ingredientes, aguantándolos con ayuda de un palillo.
En este caso en 8 de las medias rebanadas he pinchado una gamba y una aceituna rellena.
En otras 4 medias rebanadas he pinchado una gamba y medio huevo de codorniz.
En 6 medias rebanadas he pinchado una gamba y medio huevo de codorniz.
Vosotros podéis combinaros los ingredientes como mas os guste, así obtendréis un aperitivo similar a este, es fácil, ayuda a terminar sobras de la nevera y suele gustar a todo el mundo.
Aunque veáis en la foto las rebanadas enteras están cortadas por la mitad, cada palillo corresponde a una media rebanada.