Como sean están espectaculares, hasta a mi hermana Gara le encantan, eso si que es dificil. Combina a la perfección el dulce del plátano con el salado del queso.
Ingredientes:
Platanos (uno por persona)
Queso para fundir (os diría que mozzarella pero es bastante insípida, asi que os recomiendo un queso tierno de cabra, que funde perfectamente.
1 nuez de mantequilla
Preparación:
Precalentamos el horno a 200ºC (400F)
En una fuente de horno o en la misma bandeja (con papel de horno) ponemos los plátanos pelados.
Calentamos la mantequilla y pintamos los plátanos, los metemos en el horno unos 15-20 minutos por cada lado (cuidado al darles la vuelta para que no se desmoronen, mejor darles la vuelta ayudados por una espátula)
Cuando estén blandos y hayan tomado buen color los sacamos y con un cuchillo les hacemos una abertura por encima, a lo largo, con cuidado de no abrirlos demasiado ni llegar hasta abajo.
Metemos las láminas de queso o el queso rallado con cuidado y dejamos que se derrita (los podemos meter unos segundos de nuevo en el horno ya apagado)
Servir calentito.
Nota: se pueden servir acompañados de ají (salsa picante) o con un poco de nata (crema de leche) (crema) batida.