Tenía ya muchas ganas de hacer un guiso o un asado con cerveza, porque le da un toque de sabor muy bueno a la comida y finalmente me animé con este rico pollo asado a la cerveza, ya que el pollo asado es una especialidad de la casa, que siempre nos queda muy bueno porque lo hacemos en una fuente de porcelana que usamos desde siempre, de esas que hay que frotar y refrotar después de usar pero que tiene un no se qué y hace que el pollo quede de lo mas rico.
Y es que cuando haces un asado con salsa lo mejor es usar una fuente, mucho mejor que una bandeja, porque va a permitir que la carne se bañe mas en la salsita y quede muy jugosa, rica y sabrosa. Además de una manera muy fácil, que no es nada complicado asar un pollo y si lo acompañas de unas cebollitas y patatas ya verás que plato tan rico y bueno te va a quedar.
Pollo asado a la cerveza
Ingredientes
1 pollo
patatas pequeñas
cebollas pequeñas
330 ml de cerveza rubia
200 ml de zumo o néctar de melocotón
4 - 5 cucharadas grandes de salsa de soja
4 cucharada grandes de aceite de oliva
Preparación del pollo asado a la cerveza:
Vamos a emplear un pollo de tamaño grande, de todas formas si preparamos la salsa y luego nos queda mucha en la bandeja la podemos reducir al fuego en una cazuelita para que espese un poco y quedará muy rica.
El pollo lo hemos acompañado de cebollitas pequeñas y patatas también de tamaño pequeño, una forma de conseguir que se hagan bien y a la vez que el pollo es pelarlas y saltearlas un poco en una sartén con aceite hasta que tengan un poco de color, en cualquier caso las ponemos en la bandeja a la vez que el pollo.
Para hacer la salsa vamos a poner en un bol la salsa de soja con el aceite, el zumo o néctar de melocotón (mejor si es sin azúcar) y la cerveza, lo mezclamos y lo ponemos en la fuente y por encima del pollo. No olvides añadir las cebollas y las patatas que puedes poner debajo del pollo para que se hagan bien.
Lo metemos al horno a 170º durante de hora a hora y media, luego subimos la temperatura a 190º durante unos cinco minutos mas. De todas formas el tiempo depende de cada horno, le vamos a dar la vuelta cuando esté dorado por arriba y cuando veas que ya se ha dorado también por el otro lado es cuando le tienes que subir la temperatura los últimos minutos.
Una vez hecho lo puedes servir troceado en una fuente, acompañado de las cebollas y patatas y regado con la salsa. No le hemos puesto sal porque la lleva la salsa de soja pero si te gusta mas bien sabroso puedes ponerle un poco al pollo antes de meterlo al horno.