Están buenísimos y más ricos que los que se encuentran en los supermercados, asin que este año no hay excusas para no intentar hacer unos de los dulces más típicos de la Navidad, los polvorones.
Son ideales para tomar en el desayuno o en la merienda, también son ideales para regalar en estas fiestas!
(A mi me an salido 31 polvorones, según el tamaño del cortador te saldrán más o menos)
Ingredientes:
500 grs. de harina de repostería (sin levadura incorporada).120 grs. de almendra molida.
250 grs. de manteca de cerdo a temperatura ambiente.
200 grs. de azúcar glas o azúcar impalpable.
1/2 Cdta. de canela molida.
Una pizca de sal.
Azúcar glas o azúcar impalpable para espolvorear.
Preparación:
Empezamos tostando la harina junto con la almendra, las echamos mezcladas sobre una bandeja grande de horno forrada con papel vegetal y extendemos.Metemos en el horno precalentado a 180° grados, 30 minutos, removiendo la mezcla cada 10 minutos.
Sacamos del horno y dejamos enfriar a temperatura ambiente hasta el día siguiente.
Al día siguiente tamizamos la mezcla de harina y almendra sobre un bol amplio, añadimos la manteca de cerdo a temperatura ambiente, el azúcar tamizado, la pizca de sal y la canela.
Mezclamos bien hasta formar una bola homogénea, aplastamos y envolvemos en papel film, metemos en la nevera mínimo 4 horas, mejor si la dejamos hasta el día siguiente.
Sacamos la masa de la nevera 15 minutos antes de forma los polvorones.
Estiramos la masa con un grosor de 2 cm y cortamos con un cortapastas ovalado.
Colocamos cada pieza sobre una bandeja de horno forrada con papel vegetal, separamos entre sí unos centímetros.
Unimos los recortes de masa de nuevo sin amasar, solo unimos, estiramos y cortamos hasta terminar con toda.
Metemos en el horno precalentado a 200° grados y horneamos 10 minutos o hasta que veamos que se doran por los bordes.
Los pasamos a una rejilla sobre el mismo papel de hornear con cuidado, pués son fragílisimos cuando están calientes, los dejamos enfriar por completo.
Cuando estén bien fríos los espolvoreamos con azúcar glas y los envolvemos en papelillos, manipulandolos siempre con muchísimo cuidado.