Este plato es muy fácil de hacer y resulta muy "socorrido" a la hora de hacer un aperitivo rápido y ligero para la cena o un snack sencillo para cuando estás con amigos. Se puede acompañar casi de cualquier salsa y se puede elaborar tan simple o tan complicado como se quiera, porque se pueden añadir ingredientes al gusto.
Esta receta lleva ingredientes base, que son:
- papatas
- jamón
- queso
- pan rayado
- huevo
- sal
- pimienta
- aceite de oliva o de freír
Lo primero que vamos a hacer poner una olla con agua a calentar. Después hay que pelar, lavar y trocear las patatas y meterlas en la olla hasta que estén cocidas. Una vez cocidas, apartamos, escurrimos y machacamos con un tenedor 8o las pasamos por un chino).
A la patata machacada le vamos a añadir jamón york en trocitos, queso de gratinar rayado, sal y pimienta. Le podéis añadir los ingredientes que queráis: atún, bocas de mar, aceitunas sin hueso troceadas....
Cuando la mezcla esté fría, cogeremos un poquito de masa y la haremos una bolita del tamaño de una bola de pin-pon. A su vez, batiremos un huevo y pondremos pan rayado en un plato. Pasaremos la bola por el huevo primero y cuando la pasemos por el pan rayado después, la iremos aplastando un poquito.
Encenderemos el fuego de la hornilla o la vitro y pondremos una sartén con abundante aceite de oliva o el que uséis normalmente para freír. Cuando esté bien caliente, añadiremos los bocaditos de poco a poco y los retiraremos cuando estén doraditos por ambos lados. Se dejan escurrir en un plato con papel absorbente y se pueden servir con salsa barbacoa, kepchup, salsa yogur...¡¡¡la que más os guste!!!
Espero que os haya gustado y...¡¡¡bon apetit!!!
Fuente: este post proviene de Srta Pomelo, donde puedes consultar el contenido original.
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