Hoy traigo una entrada relacionada con esa época maravillosa, no obstante nada tiene que ver con los juguetes y regalos, sino con una receta que es muy popular para este día. Es la primera vez que hago rosca de reyes y estaba realmente asustada porque pensé que no me resultaría. Finalmente creo que hay muchas cosas que puedo mejorar (como la forma de la rosca) pero estoy muy satisfecha con el resultado, tenía un buen sabor y se esponjo DEMASIADO en el horno, jeje, y el que no lo hiciera era una gran preocupación.
Hay algunos datos extra que debo darles:
Para que la masa se inflara hay que añadir leche como en mi caso pero realmente tibia o agua caliente.
No pongan la sal antes que la levadura por ninguna razón.
Debemos dejar reposar la masa en un lugar cálido para que la masa crezca. En mi caso la deje en la cocina pero no sucedía nada, así que tras una hora esperando que algo pasara opte por meterla un rato al refrigerador y funcionó. Así que si les pasa lo mismo pueden probar cualquiera de estos dos. Este fue el resultado de la rosca:
Ahora va la receta del chocolate caliente que es muy básica.
Necesitamos:
1 litro de leche
1 ramita de canela
1 tableta o trozo de chocolate de mesa<]/li>Lo primero que haremos será poner a hervir la leche con la canela.
Luego añadimos el chocolate y removemos sin parar hasta que se disuelva.
En vez de leche también podemos poner agua, unas tres cucharaditas de café y un poco de azúcar o un trocito de piloncillo.
Solo queda compartirla en familia, servida con un poco de chocolate caliente. Y aunque yo la hice y acomodé los muñequitos me toco uno de ellos, así que tendré que cocinar los tamales el 2 de febrero.