Receta para preparar un pollo sabroso a la parrilla
Cuando pensamos en asado argentino normalmente nos vienen a la mente los vacios, las entrañas, los lomos, los bifes, los matambres y las achuras. Pero cada vez más, y por diferentes motivos, el pollo a la parrilla está presente en las mesas argentinas. Ya sea por razones económicas, de salud o de gusto personal, nadie rechaza un buen pollo jugoso preparado a la parrilla y acompañado de una salsa chimichurri. Por eso en Brasas y Sabores queremos traeros esta deliciosa receta para preparar un pollo sabroso a la parrilla que hará la boca agua a todos los comensales.
Lo primero que debemos tener en cuenta a la hora de preparar un pollo sabroso es la materia prima. Actualmente podemos comprar diferentes tipos de pollo y existen claras diferencias entre ellos. Podemos encontrar pollos criados en granjas industriales y pollos de campo. El mejor pollo es el que se ha criado en libertad en el campo, el que no se ha engordado a base de medicinas, sino que se ha alimentado con grano. Este pollo de campo quedará mucho más jugoso y sabroso después de pasar por nuestra parrilla. Un pollo más grasiento tendrá un sabor más intenso y un pollo fresco será siempre más delicioso que un pollo congelado.
¿Cómo preparar un pollo sabroso a la parrilla?
La preparación del pollo a la parrilla comienza por abrir el pollo. Aunque es cierto que podemos trocear el pollo en presas antes de cocinarlo, para obtener el mejor resultado debemos cocinarlo entero. Podemos abrir nuestro pollo por la parte de la pechuga o por el lomo, como más nos guste. Una vez realizado el corte, aplastamos bien el pollo para que una vez en la parrilla se cocine de forma homogénea. Es importante que el pollo esté a temperatura ambiente antes de que lo coloquemos en las brasas, para que no se queme en algunas partes y quede crudo en otras.
Una vez pongamos nuestro pollo en la parrilla debemos “marcarlo”. El marcado consiste en cocinar el pollo durante 30 minutos por cada lado a fuego lento. Hacemos esto porque el pollo contiene gran cantidad de agua y corremos el riesgo de que no se cocine uniformemente.
Cuando ya tenemos nuestro pollo a la parrilla marcado, procedemos a la cocción definitiva. Para ello debemos cocinarlo más o menos durante unos 45 minutos por cada lado hasta obtener un pollo bien cocinado en el interior y dorado y crujiente en el exterior. Un truco para saber si la carne está bien cocinada es pinchar con un cuchillo el pollo hasta el hueso. Si vemos que sale sangre o un líquido rojizo, significa que la carne está cruda. Si el líquido sale transparente, ya podemos retirar nuestro pollo de la parrilla porque está en su punto. Sin embargo, si no vemos ningún líquido, es que la carne se ha secado y nos hemos pasado del punto de cocción.
El paso final es sazonar con sal y limón nuestro pollo asado y disfrutar de su magnífico sabor y textura, acompañado de una buena salsa chimichurri. Esperamos que les guste esta receta para preparar el mejor pollo para el asado argentino. Con este pollo podrán satisfacer a todos tus invitados, aunque no les guste la carne roja o prefieran disfrutar de un asado con un sabor diferente.