Hoy directamente dejo la receta, otro día os cuento más acerca de los excelentes beneficios que aportan las calabazas, únicamente comentar, que es muy digestiva y con bajo aporte calórico, además sus semillas cargadas de nutrientes aportan grandes beneficios a nuestro organismo.
En esta receta, se combina perfectamente el suave y delicado sabor dulce de la calabaza, con las setas de la variedad Portobello, muy semejantes al champiñón, aunque de textura más tersa y compacta, además de un sabor más intenso y con un punto también de dulzor, que vamos a contrarrestar con el toque salado que nos lo aportará el queso parmesano.
Ingredientes
1 taza de arroz por persona (80-100 g)
1 cebolla
calabaza cortada en daditos
setas portobello
1,5 l de caldo de verduras
1 copita de vino blanco
queso parmesano rallado
Aceite de oliva vigen extra (AOVE)
sal y pimienta
Para elaborar la receta, comenzamos poniendo en una sartén un poco de aceite, rehogamos a fuego medio la cebolla que tendremos picada, cuando ya esté pochada, añadimos los dados de calabaza y rehogamos unos minutos, más o menos hasta que ablande esta un poco. No olvides salpimentar un poquito.
Puedes poner la cantidad de calabaza que quieras, yo puse unos 400 g para cuatro personas.
A continuación añadimos el arroz que rehogamos hasta que transparente y después añadimos la copita de vino blanco, que dejaremos reducir durante un par de minutos. Es importante remover de manera constante.
El caldo de verduras o pollo, lo podéis elaborar vosotros o comprar uno que ya este preparado, este, lo tenemos que poner en una cacerola a calentar.
El secreto de un buen risotto…
Lo importante para que salga un “buen risotto”, es ir añadiendo el caldo, muy caliente y poco a poco al arroz, moviendo suavemente para que este vaya desprendiendo el almidón.
A mitad de cocción del arroz podemos añadir los portobello, que tendremos cortados en laminas, continuar con el proceso de añadir el caldo de verduras caliente y poquito a poco hasta que este el arroz en su punto.
Este proceso suele durar entre 15-20 minutos, o el tiempo necesario para ablandar el arroz, es aconsejable probar para saber el tiempo requerido.
Cuando este listo, apaga el fuego y espolvorea con un poco de queso parmesano, que le dará untuosidad a nuestro risotto.
Y un último consejo pero muy importante, el risotto se debe comer recién hecho puesto que sino quedará hecho un “pegote”.