Estos rollitos glaseados con azúcar y canela están de muerte!!!!!
Y son muy sencillos de hacer, de verdad. Y rápidos...para darse un capricho a media tarde ( que fue lo que hice yo, jejeje).
La idea de la receta surgió porque tenía un rollo de una masa que compre en Lidl a punto de caducar. No la tienen siempre, al menos en el que yo compro. Es una masa que lleva un poco de levadura y es ideal para tartas o para estos rollitos!!
Hace mucho tiempo que quiero hacer los famosos cinnamon rolls o rollitos de canela, típicos de EEUU. Hoy he hecho una versión express en la que no hay que hacer la masa, solo preparar el relleno y el glaseado.
Hay quien le pone un glaseado elaborado con queso cremoso pero yo he preferido hacerlo simplemente con azúcar, de esta forma nos ahorramos unas pocas calorías y se hace mucho más rápido.
No he probado los auténticos cinnamon rolls, pero la verdad es que dudo que estén mucho más buenos que estos. Eso sí, receta no apta para diabéticos, porque lleva azúcar para parar un tren.
Recién hechos están de escándalo, y si te queda alguno para el día siguiente notarás que se ha puesto un poco duro pero nada del otro mundo, esta igual de bueno.
Se convierten en una merienda perfecta sí los acompañamos de un vasito de leche.
Os dejo la receta, y espero repetirla pronto con la típica masa de los cinnamon rolls para que los que no encontréis la masa "yeast dought " también los podáis probar.
Vamos con la receta.
Preparación
Sacar la masa de la nevera 30 minutos antes de su utilización.
Estirar la masa y pincelar con un poco de mantequilla derretida.
Mezclar todos los ingredientes del relleno y cubrir la masa. Dejaremos como un centímetro y medio por el borde sin cubrir.
Enrollar la masa y cortar en trozos de unos 2 dedos de grosor.A mi me salieron 12 rollitos.
Colocar sobre papel de hornear, bien en la bandeja del horno o en una fuente redonda. Yo los puse pegaditos unos a otros para que al servirlos se vieran más bonitos, pero la verdad es que se pegan unos a otros y a la hora de cortar es un poco rollo.
Os aviso que al colocarlos hacia arriba se abre un poco la masa por lo que aconsejo que la apretéis bien cuando la enrolléis
Introducir en el horno precalentado a 180º, en la zona central del mismo durante 15 minutos.
Pasado este tiempo sacar y dejar que se enfríen un poco... lo justo para no abrasaros la boca cuando le deis el bocado. Y es que recién hechos están espectaculares, increibles
Sí es que os sobra alguno..... guardar una vez fríos en un recipiente hermético.
Espero que os haya gustado la receta de hoy.