Seguro que muchos de vosotros estáis disfrutando de vuestros regalos de reyes, libros de cocina, cámaras de fotos, juguetes, y todas las cosas que habéis pedido.
Yo he debido de portarme muy mal este año, porque me he levantado esta mañana yo no tenía nada debajo del árbol, y eso que les dejé un trozo de roscón debajo :P
Cómo no me han traído nada, voy a volver a hacer la carta que les dejé:
Un trípode nuevo (el pobrecito que tenía me dijo adiós y hacer las fotos a pulso es complicado, y más con mi pulso de cirujano :P)
Unos cuantos libros de recetas y de fotografía culinaria que les tengo echados el ojo (no voy a decir cuales son, si son reyes magos lo tienen que adivinar solos :P)
Y una kitchen aid azul hielo con bol de cristal (se que esto es imposible, pero si cuela, cuela ¿o, no? :P)
Total, que si leen esta carta ya me espero estos regalos para el año que viene, y ya puedo portarme bien para que me lo traigan todo.
Bueno, vamos a lo que vamos que me voy por las ramas.
El roscón, ese dulce que solo lo tomamos en cantidades industriales dos días al año. Realmente con el olor que deja en la cocina debería estar obligado prepararlo todos los domingos para desayunar.
El año pasado ya preparé un roscón que estaba muy muy rico, pero me quedé con una espinita por no probar otras recetas.
Y como hace unos meses me autoregalé el libro de Ibán Yarza tenía que probar la receta del roscón que iba dentro. Es hiper tierno, con unos aromas increíbles.
La única pega que le puedo poner es que al principio la masa me quedó algo pringosa. Además se me abrió un poco por arriba, pero eso es culpa mía porque se me pegó el trapo mientras fermentaba!! Pero eso no me lo tengáis en cuenta, que yo este roscón lo repito dentro de nada y el trapo no se me vuelve a pegar :P
Sin más, la receta espectacular de roscón.
Roscón de reyes (Receta del libro Pan Casero de Ibán Yarza)
Para un roscón enorme o dos medianos
Para el prefermento
90 gramos de harina de fuerza
50 gramos de leche entera
2 gramos de levadura fresca de panadería
Para la masa
El prefermento
120 ml de leche entera
340 gramos de harina de fuerza
80 gramos de azúcar
15 gramos de levadura fresca de panadería
2 huevos M
60 gramos de mantequilla
3 cucharaditas de ron
2 cucharaditas de agua de azahar
La ralladura de un limón
La piel de una naranja
Un palo de canela
Almendra molida
Naranja confitada
Cerezas confitadas
Azúcar humedecido con unas gotas de agua de azahar
Para preparar el prefermento pondremos en un bol la harina, la leche y la levadura. Mezclamos bien hasta que tengamos una bola homogénea. Colocamos la bola en un bol y dejamos reposar 3 horas, o toda la noche en el frigorífico (yo la he tenido toda la noche en el frigorífico).
Al día siguiente, haremos la masa mezclando en el bol de la batidora todos los ingredientes excepto la mantequilla. Os recomiendo que no echéis todo el líquido a la vez, así evitaréis tener una masa demasiado líquida, es mejor ir corrigiendo si vemos que queda una masa seca. Amasamos unos 10 minutos. Agregamos la mantequilla, que deberá estar más bien fría. Amasamos otros 10 minutos hasta que tengamos una masa lisa y brillante. Dejamos fermentar en un bol cubierto con film transparente o un trapo hasta que doble su volumen.
Cuando nuestra masa haya doblado su volumen, la pasaremos a la mesa ligeramente enharinada. Cuidado en este paso de no desgarrar la masa. Ahora es el momento de decidir si hacer un roscón gigante o hacer dos medianos. Desgasamos la masa y la boleamos. Dejaremos reposar la masa unos 15 minutos antes de formar, así nos resultará más sencillo y no desgarraremos la masa.
Para formar el roscón nos enharinamos un poco las manos para que no se nos pegue la masa y le iremos dando forma. Primero, pondremos dos dedos en el centro de la bola hasta que toquemos la mesa para obtener el agujero y entonces comenzaremos a estirarla suavemente hasta que tengamos nuestro roscón totalmente formado.
Pondremos el roscón sobre papel de horno. Si vemos que la masa está tensa y pierde un poco la forma la dejamos reposar cinco minutos y luego le volvemos a corregir la forma. Este es el momento de esconder el haba y el regalito. Pincelamos el roscón con huevo batido y lo dejamos fermentar hasta que doble su volumen.
Una vez haya doblado, lo volvemos a pincelar bien con el huevo con mucho cuidado para no pinchar el roscón. Le ponemos las frutas escarchadas, las almendras y el azúcar humedecido.
Horneamos a 190º durante 25-30 minutos. Si vemos que se dora demasiado lo tapamos con papel de aluminio.
Y ahora solo nos queda rellenarlo de lo que más nos guste y disfrutar del roscón.
Venga va, dadme envidia con vuestros regalos y enseñadme todos los roscones que habéis preparado.
Nos vemos muy pronto (ya tengo la siguiente receta en el horno)
Un millón de besos, se os quiere ?
Fuente: este post proviene de The Sweetest Taste, donde puedes consultar el contenido original.
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