Roscos de huevo
Los Roscos de huevo son uno de los dulces con mayor tradición en la Gastronomía española. Navidad y Semana Santa son los dos momentos del año en que más se consumen aunque en realidad están deliciosos en cualquier momento del año. Te invito a conocer la receta y así mantener vivas nuestras tradiciones.Hay que reconocer que preparar estos Roscos de huevo puede resultar un poco laborioso, que no difícil. Pero la verdad es que el resultado merece la pena. Una vez que has probado a hacerlos repites, porque no habrás probado otros iguales ni por asomo.
Lo más importante es que estaremos comiendo un dulce con ingredientes de calidad y sin conservantes, con el sabor de toda la vida. Quizá te pueda interesar ver la receta de estos otros dulces tradicionales como las flores de cuaresma o de carnaval, pestiños o borrachuelos o las torrijas, ¡todos ellos riquísimos!
No pierdas detalle de la elaboración de los roscos porque no es nada complicada, aunque lleva su tiempo y, por eso, necesitamos paciencia.
Ingredientes (para unos 40-45 roscos)
Para la masa
3 huevos L
250ml. de leche
1 vaso de azúcar
250ml. de aceite de girasol
raspadura de limón
1 sobre de levadura química (puedes sustituir por dos sobres de gaseosa el tigre)
1 kg. De harina de fuerza (si no la tienes puedes usar harina de trigo de todo uso)
Para freír
Aceite de girasol
para rebozar
1 vaso de anís (licor)
Medio vaso de agua
Azúcar para emborrizar.
Elaboración
La masa
Coloca en un recipiente amplio los huevos, la leche, el azúcar, el aceite de girasol y la raspadura de limón. Bate todos estos ingredientes con la batidora. Cuando consigas una mezcla homogénea aparta la batidora.
Es el momento de ir añadiendo la harina y la levadura tamizadas poco a poco sin dejar de mover con una cuchara de madera, hasta que obtengas una bola que se despegue del recipiente con facilidad.
Calienta en una sartén el aceite de girasol que vas a usar para freír los roscos.
Mientras adquiere temperatura el aceite, comienza a dar forma a las rosquillas. Para ello mójate las manos en aceite de girasol, así no se te pegará la masa. Haz bolitas con la masa e introduce el dedo en el centro para dar forma de rosco. Coloca sobre una bandeja.
freímos
Fríe con el aceite a fuego medio para que no se quemen por fuera y queden hechos por dentro.
Una vez fritos, coloca sobre papel absorbente para que suelten el exceso de aceite.
Rebozado
A continuación prepara una mezcla de 1 vaso de anís y medio vaso de agua (siempre en esa proporción) para bañar los roscos. Sumérgelos y saca enseguida, no conviene que lo dejes empapar porque se romperán. Una vez bañados, pasa por el azúcar y reboza con ella.Coloca después sobre unos paños de cocina limpios para que se oreen y terminen de enfriarse por completo. Una vez que estén bien fríos ya puedes envasarlos y guardar. Si los guardas en táper de plástico tapados serásuficiente para mantenerlos hasta una semana en perfectas condiciones, aunque yo creo que acabaréis con ellos mucho antes.
Nota: La masa se puede dejar reposar media hora antes de freír para que la levadura fermente, pero no es necesario porque al freír verás cómo los roscos se ponen gorditos.
Mira el corte tan delicioso que tienen, se hace la boca agua solo con verlo.
Y a ti, ¿qué dulce tradicional es el que más te gusta? Estaremos encantados de leeros en comentarios, así como resolver cualquier duda que se os pueda plantear. Y si te animas a hacer estos ricos Roscos de huevo nos encantará que nos mandes las fotos a través de nuestras redes sociales.
Que lo disfrutéis Cocinitas!! Hasta la próxima!!
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