INGREDIENTES
- 1 Masa de Hojaldre
- Pate de Jamón de York
- Paté de Salmón Ahumado
- 1 Lata de Atún
- 1 Cucharada grande de Salsa de Tomate
- 1 Huevo Batido
- Para la decoración: Orégano, semillas de sésamo (ajonjolí), perejil seco y eneldo.
ELABORACION
Estira la masa de hojaldre a temperatura ambiente y marca líneas paralelas con una separación de unos 4 dedos de grosor entre ellas. Esa será la guía para ir introduciendo los rellenos en el centro de cada una de las tiras que se formen.
En este caso he elegido rellenar las primeras tandas de saladitos con paté de Jamón de York y paté de Salmón Ahumado. Puedes utilizar patés comprados, pero si quieres hacerlos caseros es muy rápido y fácil, pulsa en los siguientes enlaces para ver cómo se preparan en cuestión de minutos:
Ver receta de Paté de Jamón de York
Ver receta de Paté de Salmón Ahumado
Para la última tanda de saladitos he mezclado una lata de atún con una cucharada de salsa de tomate.
Una vez que tengas los rellenos preparados, deposítalos formando una hilera sobre cada una de las tiras de hojaldre que hemos marcado anteriormente. Cierra con cuidado los bordes más largos, uno sobre el otro y da la vuelta a todo el conjunto como si estuvieran enrollando la masa sobre la mesa con mucha suavidad. Solo hay que balancear todo el "tubo" de hojaldre que hemos formado para que no se abra y aplanarlo un poquito por encima.
Una vez que tenemos relleno el "tubo" de hojaldre lo partimos en trocitos equidistantes y de cada uno de los trozos hay que intentar que no se salga el relleno (dentro de lo posible) aplanando los bordecitos con el cuchillo.
Cuando tengas todos tus saladitos recortados, píntalos con huevo batido y deposítalos sobre una bandeja de horno cubierta con papel vegetal. Decora cada tipo con un topping diferente, por ejemplo, eneldo para los de Salmón Ahumado, ajonjolí para los de atún, orégano para los de jamón de York. Este último paso puedes hacerlo a tu gusto, pero lo ideal es que puedas distinguir cada tipo de relleno por el topping exterior.
Hornea tus saladitos durante unos 15 minutos a 180º aproximadamente, o hasta que veas que están doraditos.
Déjalos enfriar unos minutos y ya están listos para comer.