Hola!
Hoy traigo un clásico! Scones. Con un sabor a manteca y muy esponjosos. No te la podes perder!
Empecemos con el paso a paso para que te queden geniales!
Ingredientes
80 ml de Nata (crema de leche)
1 Huevo
4o gr de Azúcar
1 cucharadita de polvo de hornear
200 gr de Harina común
60 gr de Mantequilla fría
1 cucharada de queso blanco (tipo Filadelfia)
1 pizca de sal Para empezar hay que tamizar la harina con el polvo de hornear. Luego le agregamos la mantequilla cortada en cuadraditos.
Con la yema de los dedos o con un cornet o mismo un tenedor, vamos a integrar todo, hasta que quede un arenado.
Reservamos esa preparación. Por otro lados vamos a mezclar la nata (crema de leche), el huevo y el queso. Lo mezclamos bien hasta que quede todo bien integrado.
Ahora, vamos a juntar las dos partes. No hay que amasar, ni mezclar de mas. Asi que lo mejor es hacerlo con un cornet, o un tenedor. Tiene que quedar una mezcla pegajosa.
Por último, la vamos a colocar en un papel film, y le vamos a dar forma redonda.
La vamos a llevar a la heladera por aproximadamente media hora, para que la manteca se enfrie y quede una masa mas facil de manejar. Este paso en esta receta es muy importante, ya que de no hacerlo, no podrías cortar las formas.
Una vez pasado ese tiempo, retiramos la masa de la heladera, y enharinamos una base y con palo de amasar la vamos a estirar no muy fina, y con un cortante redondo sacamos los scones.
En una fuente para horno con un papel manteca, los colocamos dejando un espacio entre cada uno, ya que en el horno se van a hinchar un poco. Los pintamos con huevo batido y los metemos al horno. 180 grados, hasta que veas que esten doraditos. Dependiendo del horno son unos 15 minutos mas o menos. Pero no te descuides.
Los sacas y listos para comer!!
El mejor acompañante para un te por la tarde, un desayuno o cuando tengas ganas de comer algo rico.
Espero que te haya gustado la receta, y nos vemos la próxima con mas cosas ricas!! :)