Estos bollos los tenía en pendientes desde hace varios años, pero por un motivo u otro no había podido hacerlos antes, y no porque no me gusten este tipo de recetas, al contrario, la bollería es una de mis elaboraciones preferidas. La receta, como la de la mayoría de las versiones que he visto por Internet, es la de Iban Yarza de su libro Pan Casero.
INGREDIENTES (Para ocho bollos como los de la foto):
Para la masa:
450 gr. de harina de fuerza
200 ml. de leche entera
70 gr. de azúcar
1 huevo
7 gr. de levadura seca de panadería
5 gr. de sal
1 cucharadita de cardamomo molido
Para la crema de almendras:
125 gr. de almendra molida
100 gr. de azúcar
60 ml. de leche
Para el relleno:
400 ml. de nata (crema de leche) para montar
100 gr. de azúcar glass
Para la decoración:
1 huevo para pincelar la masa antes de hornear
Azúcar glass
PREPARACIÓN:Ponemos a calentar la leche junto con la mantequilla en un cazo. Cuando se derrita completamente la mantequilla retiramos del fuego y dejamos enfriar.
Después en el bol de la amasadora ponemos los ingredientes secos, salvo la sal y añadimos la mezcla de leche y mantequilla, junto con el huevo ligeramente batido, empezamos a amasar y cuando se integre todo añadimos la sal y seguimos amasando durante unos diez minutos más. No es una masa muy complicada de trabajar, por lo que también podéis amasar a mano.
Una vez pasado el tiempo de amasado sacamos e introducimos la masa en forma de bola en un bol aceitado. Tapamos con film transparente y dejamos hasta que doble su volumen. Unas dos horas aproximadamente (depende de la temperatura que tengáis en el ambiente, ya sabéis que los tiempos de levado no son matemáticos, dependen de muchos factores).
Mientras la masa sube preparamos la crema de almendras, para ello ponemos a calentar la mantequilla con la leche y cuando se derrita añadimos la almendra molida, removemos bien hasta integrar y retiramos del fuego. Vertemos en un bol y cuando se enfríe llevamos a la nevera.
Una vez que la masa haya levado sacamos del bol y desgasificamos con los nudillos. Dividimos en ocho porciones la masa de 100 gr. aproximadamente y dejamos tapados sobre la encimera con un paño húmedo durante diez minutos. Pasados estos diez minutos le damos forma de bola a cada bollito, dejando por debajo la unión de la masa y por arriba completamente lisa. Depositamos sobre una bandeja de horno, con papel vegetal debajo, dejando espacio entre ellos para que no se peguen durante el horneado. Tapamos con papel film untado con un poco de aceite para que no se pegue a los bollitos y de nuevo esperamos que doblen su volumen, otras dos horas aproximadamente.
Una vez pasado el tiempo ponemos a precalentar el horno a 250º durante unos diez minutos y pintamos los bollitos con huevo batido. Introducimos y bajamos a 200º , horneamos durante unos diez o doce minutos. Sacamos y dejamos enfriar totalmente sobre una rejilla.
Mientras tanto montamos la nata (crema de leche) con unas variilas eléctricas, añadiendo el azúcar glass a última hora. Introducimos en una manga pastelera con boquilla rizada.
Cortamos una tapa de los bollitos, con forma triangular, untamos el bollito con una cucharada generosa de crema de almendras y por encima añadimos la nata montada (crema de leche). Tapamos el bollito y espolvoreamos azúcar glass por encima.
Si queréis podéis servirlo en un plato con un fondo de leche caliente. De cualquier forma estará espectacular.
Espero que os haya gustada y que probéis a hacerlos en casa, desde luego que merece la pena, y no es una masa complicada de elaborar como otro tipo de bollería más especial. Así que os animo a que los hagáis.