¡Mirad lo que me pasa cuando me ha dado la vena creativa en la cocina! Bueno, en verdad, más que vena creativa fue más bien un intento de preparar algo rico de picoteo con lo que tenia por casa.
La historia en muy sencilla. Después de estar todo el día de aquí para allá llegamos a casa y me acuerdo que tenemos que que cenar, lo primero que hice, como no, fue mirar la nevera. En cuanto vi que tenia pimientos verdes y jamón pensé ¡Serranitos! Pero claro, enseguida me di cuenta que no tenia nada de pan para bocadillo. Así que me toco recurrir a lo mas parecido que tenia por casa, el pan de molde. Y ya que estaba metido en faena se me ocurrió hacerlos enrollados. ¡La verdad es que quedan muy originales ¡Y muy fáciles de comer!
¿Que os parece mi idea? ¿Os apetece prepara estos serranitos enrollados para cenar? Pues vamos con la receta.
Ingredientes
Para 8 rollitos
8 rebanadas de pan de molde
1 pechuga de pollo
16 lonchas de jamón serrano
4 pimientos italianos
Tomate rallado (Sin mucho jugo, solo la pulpa)
Aceite de oliva
Sal
Cómo preparar los serranitos enrollados
1.- Cortamos la pechuga en dos filetes gruesos y la asamos en una sartén con unas gotas de aceite de oliva. Cortamos cada filete en cuatro tiras gruesas
2.- Por otro lado quitamos el rabillo a los pimientos italianos, los partimos por la mitad a lo largo, quitamos las semillas que puedan tener y los freímos en aceite de oliva hasta que tomen un poco de color. No es necesario hacerlos en mucha cantidad de aceite, en mejor en una sartén con poco aceite y darles la vuelta cada poco tiempo. Una vez los tengamos fritos los dejamos sobre papel de cocina para que escurran el aceite.
3.- Al pan de molde le quitamos la corteza con un cuchillo y con la ayuda de un rodillo los chafamos un poco. No hace falta que queden muy finos.
4.- Ahora montamos los serranitos: Colocamos sobre cada lamina de pan de molde el jamón intentando cubrir todo el pan. Ponemos el medio pimiento frito, repartimos un poquito de tomate rallado y colocamos una tira de pollo. Enrollamos y apretamos un poco con la mano para que mantenga la forma.
5.- Justo antes de servir doramos los rollitos sobre una sartén bien caliente con unas gotitas de aceite. ¡Para acompañar nada mejor que una cerveza bien fría!
¿A que son fáciles? Pues ya sabéis, ya tenéis otra receta rica pendiente para estos días
Nos vemos mañana
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Un abrazo
Fuente: este post proviene de Cuuking!, donde puedes consultar el contenido original.
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