Todos tenemos claro que la sal, en mayor o menor medida, es uno de los ingredientes imprescindibles en la cocina. Desde hace siglos la sal ha servido para sazonar, aderezar, curar, cocinar y conservar todo tipo de alimento
Por lo general, en la cocina, utilizamos la sal común. Pero hoy en día hay muchas variedades y muchas combinaciones para diferentes usos. Dependiendo de su procedencia y la manera de obtención y procesamiento existen diferentes tipos de sal: la sal marina y la sal de mina, la denominamos como sal común.
La sal natural de origen mineral, se obtiene mediante evaporación solar y posteriormente se procesa para su uso. Como, por ejemplo, la sal de Jumsal que se obtiene del paisaje natural de la Sierra del Carche (Jumilla). Este el tipo de sal de mesa puede recibir otros nombres: sal de mina, sal de roca o sal gema. Todos estos nombres relacionados con su proceso de extracción de las minas
La sal de origen marino, se obtiene a partir de la evaporación solar del agua de mar que se cristaliza en forma de grano. Pero, ¿Cuántas variedades de sal conocemos a la hora de cocinar?
¿Que tipos de la sal podemos encontrar en la cocina?
Sal común o sal de mesa. La más habitual, la que compramos en cualquier supermercado. Es una sal de grano fino. Por su origen puede ser tanto sal gema, como sal marina. En el caso de adición de yodo, se le denomina Sal yodada.Sal gruesa. Muy versátil para la cocina. Es especial para aderezar carnes, pescados, cocinar a la plancha o a la brasa. Ideal para preparar recetas al horno, como la lubina o la dorada a la sal. También sirve para encurtir y marinar pescados o curar carnes.
Sal en escamas. Se produce de manera artesanal, formando grandes cristales. Tiene una textura delicada y crujiente, con un sabor intenso. Se utiliza sobre todo en la finalización de platos.
Flor de sal. Es una de las más caras y populares en la alta cocina es francesa Son diminutos cristales de marina sin refinar.
Sal del Himalaya o sal rosa, muy de moda por sus virtudes saludables. Se caracteriza por el color llamativo aunque químicamente es una sal normal.
La flor de sal. Es una de las más valoradas y caras. Se trata de una sal que se encuentra en la superficie del mar en forma de escamas. Es muy escasa y, además, requiere un trabajo manual de recogida, de ahí su elevado precio. Es una sal de sabor suave y no se apelmaza.
Sal negra de Hawái. Lleva mezcla con carbón vegetal activo, de ahi su color. Sobre todo se usa para presentación de platos
Sal ahumada. Se trata habitualmente de sal gruesa a la que se le da un toque ahumado de diferentes formas. Desde ahumando la sal con humo, recubriendo la sal con aceite de aromas ahumados, o con saborizantes. Se utiliza para dar sabor ahumado a productos como el salmón, algunos embutidos, el seitán o el tofu
Sales aromatizadas. En el mercado cada día hay mas tipos de sal con diferentes condimentos y aromas. Desde las mas clásicas como la sal de ajo o la sal de hierbas a otras mucho más modernas como la sal con aroma de tomate, de limón ¡O incluso con vainilla!
¿Sabías que había tantos tipos de sal? ¿Conoces alguna más aparte de las que te hablo en este post? Cuéntamelo en comentarios.