Una de sus muchas, y deliciosas recetas, es este Crazy o Depression Cake, nombre que se le da a este bizcocho que no lleva ni huevos, ni lácteos?.pero que está buenísimo!!!!!!!!!!!!! Y doy fe de ello, porque lo he hecho muchas veces y siempre con un éxito rotundo.
Lo mejor?. Si no queréis, no tenéis que ensuciar más molde que el propio donde vayáis a hornearlo. ¿Cómo? Ojo a la receta?.
Para darle un toque diferente, tipo brownie, le añado nueces y os aseguro que no tiene naaaada que envidiar al mejor brownie americano del mercado.
Hoy este pastel va dedicado a todos vosotros. Enamorados o no, que disfrutáis de este día en compañía de vuestra media naranja, vuestro medio limón o. simplemente, solos. Porque vamos a ver? ¿por qué el día de los enamorados tiene que ser un día sólo para los que creen en el amor? Pues no, hoy también es tu día, así que haz que sea diferente a los demás y disfruta de él?. Sólo o en compañía. Eso sí, en paz y armonía!!!!!!
Va por vosotros?. Y recordad, si no queréis?? no tenéis porque compartirlo con nadie!!!
Ingredientes
1 y ½ taza de harina normal
3 cucharadas soperas de cacao en polvo
1 taza de azúcar
1 cucharadita de bicarbonato sódico
1 pizca de sal
5 cucharadas de aceite de girasol
1 cucharadita de esencia de vainilla
1 cucharadita de vinagre
1 taza de agua
Para la cobertura
200 ml de agua
20 grs de maicena
250 grs de chocolate negro
Precalentar el horno a 180º.
En el molde donde vayamos a hornearlo, ponemos los ingredientes secos: harina, cacao, azúcar, bicarbonato y sal. Y mezclamos bien con ayuda de unas varillas. Hacemos tres agujeros en la mezcla y vertemos en uno el aceite, en otro el vinagre y en el último la vainilla.
Echamos por encima la taza de agua y mezclamos bien todos los ingredientes hasta obtener una mezcla homogénea.
En función del molde, horneamos unos 20-25 minutos (si el molde es pequeño y debido a la altura del bizcocho tendréis que hornearlo unos 30-35 minutos). No obstante, y para aseguraros de que está hecho, pinchar con un palito y si sale limpio es que ya está listo.
Sacamos del horno y dejamos enfriar.
Preparamos la cobertura. Mezclamos el agua con la maicena y calentamos a fuego medio-bajo. Incorporamos le chocolate troceado y removemos continuamente hasta que se funda. Retiramos del fuego y dejamos templar.
Cuando el bizcocho esté completamente frío, vertemos sobre él la cobertura de chocolate y metemos en la nevera hasta que se solidifique la cobertura. Podéis acompañarlo de nata (crema de leche) o helado de vainilla. Delicioso!!!
Este bizcocho está mejor de un día para otro, así que no seáis impacientes y dejarlo reposar. No os arrepentiréis!!!!!
Bon Àppetit!!!
Fuente: este post proviene de Cuadernos de cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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