Ingredientes:
Para el bizcocho:
4 cucharadas rasas de maicena
10 yemas
2 huevos.
Para el almíbar:
500 mililitros de agua.
410 gramos de azúcar.
1 copita de Cointreau.
Para la crema de yema:
8 cucharadas soperas de azúcar.
6 yemas.
Agua (para cubrir el azúcar).
Elaboración:
Comenzamos el día de antes preparando el bizcocho, para ello batimos con las varillas las yemas y los huevos durante al menos 20 minutos hasta que quede muy muy esponjoso (en la KA velocidad 6). Después de ese tiempo añadimos la maicena mezclando con movimientos envolventes para evitar que baje.
Vertemos la mezcla en un molde bien engrasado (de unos 25 centímetros) y horneamos a 180 grados aproximadamente 20 minutos. Mientras el bizcocho está en el horno preparamos el almíbar, para ello calentamos a fuego alto el agua con el azúcar (debe espedar ligeramente pero sin llegar a tomar color). Un par de minutos antes de retirarlo del fuego le añadimos el cointreau.
Vertemos todo el almíbar caliente sobre el bizcocho, sin desmoldar, que también debe estar caliente (podemos pincharlo un poco para que cale mejor) y dejamos reposar al menos 12 horas.
Transcurrido el reposo pasamos a preparar la crema de yema. Preparamos para ello un almíbar muy espeso y lo vertemos en forma de hilo sobre las yemas batidas sin dejar de remover. Una vez que esté bien mezclado volvemos a llevar la crema al fuego hasta que espese.
Cuando tengamos la crema lista la vertemos sobre el bizcocho. Espolvoreamos con un poco de azúcar (a poder ser moreno) y la quemamos con la pala.
Y ya tenemos lista nuestra capuchina para disfrutar.