Yo tengo un montón de manzanas de casa, así que no me queda más remedio que buscar todo tipo de recetas con manzanas.
Esta tarta es tan fácil de hacer que casi, hasta da vergüenza. Pero todo lo que tiene de sencilla lo tiene de deliciosa.
Ingredientes:
- 4 manzanas peladas y picadas más otra manzana coratada en láminas para decorar
- 4 huevos
- 1 vaso de harina ( yo usé de medida uno de los clásicos vasos de Nocilla)
- 1 vaso de leche
- 1 vaso de azúcar
-1 sobre de levadura
- un poco de azúcar y canela para espolvorear.
Elaboración:
En el vaso de la batidora mezclar todos los ingredientes hasta que se conviertan en una pasta más bien líquida y homogénea.
Untar un molde con aceite y forrarlo con papel vegetal para poder desmoldarla bien ( yo usé un molde de Pyrex y no me hizo falta el papel).
Colocar la masa en el molde, adornar con las láminas de manzana y espolvorear con azúcar y canela.
Hornear a 175ºC con calor arriba y abajo ( yo puse calor con ventilador) durante 60 minutos, antes de sacar del horno pincharla para comprobar que está bien hecha.
Sacarla del horno y dejar enfriar antes de servir (más que nada porque caliente se rompe con mucha facilidad)
Está riquísima, con un sabor a manzana intenso, el toque de la canela,...¡deliciosa!
Os garantizo que no os durará nada.
Queda con una textura similar al flan, pero con más cuerpo, un poco como pudin, creo que a medio camino entre flan y pudin.
Espero que la probéis.
¡Hasta pronto!