El tiramisú o la panna cotta quizá sean los más representativos, pero la tarta de tres chocolates no se queda atrás.
Para entender su éxito, tenemos que reparar en su sabor y sencillez.
Es una tarta fría, compuesta por cuatro capas: galleta abajo, chocolate negro, chocolate con leche y chocolate blanco, estos ordenados indistintamente.
La tarta tres chocolates, es un recurso habitual cuando tenemos la necesidad de elaborar un postre, pero no disponemos de suficiente tiempo como para llevar a cabo una clásica tarta con bizcocho.
Se presenta como la reina de los cumpleaños, y es que suele gustar a todo el mundo.
Cómo hacer una tarta tres chocolates en Thermomix de forma fácil
Al tratarse de una elaboración sencilla, que emplea cuajada en polvo o gelatina para dar consistencia a las capas, es vital que empleemos chocolates de calidad, pues al final la cuajada tiene un sabor generalmente neutro.Tampoco deberíamos descuidar las galletas, aunque si bien podríamos usar las típicas galletas María, y el resultado sería fantástico, se me ocurre utilizar en esta ocasión las maravillosas galletas Lotus, con ese toque acaramelado que redondeará el sabor de nuestra tarta tres chocolates.
Puede ser que alguna vez hayamos probado esta tarta y nos haya parecido inusualmente dulce, pero si prescindimos del azúcar, damos un toque salado a la galleta, y empleamos chocolate negro muy puro, obtendremos un resultado perfectamente equilibrado.
Con la ayuda inestimable de nuestro robot de cocina Thermomix, podremos preparar una tarta de tres chocolates de forma muy sencilla y rápida. Vamos allá.
Ingredientes:
Galletas Lotus 200 g. (base) - Comprar
Mantequilla 100 g. (base)
Sal 3 g. (base)
Leche entera 600 ml. (200 ml. por capa)
Nata (crema de leche) para montar mínimo 35% M.G (200 ml. por capa)
Sobre de cuajada en polvo 36 g. (12 g. capa)
Chocolate blanco Callebaut 150 g. - Comprar
Chocolate con leche Callebaut 150 g.
Chocolate negro Callebaut 150 g.
Almendra crocanti y/o chocolate laminado para decorar
Elaboración:
Antes de comenzar a preparar la tarta, tendremos que preparar el molde, que en esta ocasión será de unos 20 o 22 cm. de diámetro, y con cierta altura. Dado que no coceremos la tarta en el horno, no es necesario que lo forremos, ni siquiera que lo engrasemos, a no ser que estuviera especialmente maltratado. Simplemente, lo dejaremos a mano. Empezaremos con la base de galletas y mantequilla.
Dispondremos las galletas en el vaso de la Thermomix, procederemos a triturarlas. Para ello, programaremos 5 segundos a velocidad 7. En caso de que algún trozo haya quedado excesivamente grande, le daremos algunos segundos más. Habrá que reducirlas a polvo. Agregaremos la mantequilla en trozos junto a la sal, que preferiblemente habremos dejado atemperar un rato antes.
Trituraremos durante 5 segundos a velocidad 5, y comprobaremos que ha quedado perfectamente disuelta en la galleta. Volcaremos la mezclaen la base del molde, y la iremos acomodando con una cuchara o espátula de repostería. Trataremos de que quede perfectamente nivelada. Mientras preparamos relleno, introduciremos el molde con la base de galleta en el frigorífico, filmada al ras.
Limpiaremos bien el vaso y echaremos el chocolate negro, la leche, la nata (crema de leche) y el sobre de cuajada. Proporcionaremos algo de calor a la mezcla, puesto que el chocolate debe derretirse. Para ello, programaremos 7 min, a 90º y velocidad 5. Es posible que nos veamos tentados a poner más temperatura, pero no lo hagáis, el chocolate podría quemarse y arruinar nuestra tarta.
Sacaremos el molde de la nevera y verteremos encima la mezcla, al mismo tiempo que le damos unos pequeños golpecitos para tratar de eliminar el aire que pudiera haber quedado atrapado. Lo filmaremos y guardaremos en la nevera mientras vamos marchando la siguiente capa. Limpiaremos bien el vaso.
Realizaremos el mismo proceso con el chocolate con leche. Programaremos 7 min, a 90º y velocidad 5. Comprobaremos si el chocolate blanco ha solidificado, y de ser así, sacaremos el molde del frigorífico. Para crear más superficie de contacto, y valiéndonos de un tenedor, rallaremos la superficie ligeramente. Acto seguido, verteremos la mezcla sobre la primera capa.
Filmaremos y regresaremos al frigorífico. Nuevamente, llevaremos a cabo el mismo proceso, pero esta vez con el chocolate blanco. Tras haber integrado los ingredientes, finalmente, volveremos a sacar la tarta del frigorífico y verteremos la última capa. La volveremos a enviar a la nevera, y la dejaremos enfriar al menos 6 horas antes de devorarla.
Como sugerencia de presentación, podemos espolvorear un poco de almendra crocanti, o laminar un poco de chocolate. Es frecuente también encontrar estas tartas coronadas por las típicas bolas de chocolate rellenas de galleta. Esta tarta aguanta muy bien correctamente refrigerada, y no tiende a resecarse, o sea que podremos conservarla en la nevera por hasta 4 días perfectamente.
¡A disfrutar!
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