La entrada de hoy no tiene ningún misterio, no es una novedad que os va a dejar con la boca abierta (como mucho dependiendo de la hora a la que leáis la entrada, quizá os empiecen a hacer ruidos las tripas), ni os voy a descubrir ninguna receta nueva que no hayáis visto ya por aquí, pero me apetecía compartirla con vosotros por varias razones.
Es una tarta fácil. Es cierto que tiene cierta elaboración, pero podemos decir que no tiene ninguna dificultad y en cambio es súper aparente, vistosa y a los más pequeños les encanta.
Como requiere hacer varios cortes para darle forma de mariposa mi bizcocho preferido, el de choco que habéis visto por aquí montones de veces, es perfecto porque al ser compacto se corta muy bien y es ideal para después rellenar o untar con nuestros ingredientes preferidos.
De sabor es súper rica. El bizcocho de choco, la mermelada o nocilla con la que untamos las diferentes capas y los lacasitos son éxito asegurado, no puedo decir lo mismo del fondant que normalmente aunque precioso suele resultar demasiado dulzón.
Los más pequeños pueden ayudarnos a separar los lacasitos por colores y claro....ya de paso ejercer la dura tarea de control de calidad al ir zampándose los que están rotos o descascarillados ;)
El bizcocho para esta tarta lo debemos hacer en un molde redondo grande y como luego la colocación de las partes (para que adquiera la forma de mariposa) nos exige que tengamos una bandeja grande y no siempre suele ser así....aquí os cuento un truquillo que como a mí, os puede venir fenomenal para estas ocasiones o para otras muchas que lleváis pasteles, sándwiches o lo que sea a la oficina, el colegio o a una celebración de la que luego no queréis salir con la bandeja.
Es un truco de esos tontunos, pero creo que nos facilita mucho las cosas.
Simplemente necesitamos unos materiales que casi siempre tenemos en casa.
- Cartón de cualquier caja de embalaje
- Plastico transparente adhesivo (del de forrar los libros)
- Cartulina del color deseado para nuestra bandeja, también puede ser papel decorado, de envolver o incluso servilletas decoradas, de esas que da pena usar.
Y ya tenemos la bandeja de diseño y medidas necesarias para cada ocasión, por supuesto limpiaremos perfectamente con un trapo humedecido antes y después de cada uso y de esta forma la podremos reciclar para la siguiente celebración.
La Elaboración de la tarta como os decía...es muy sencilla y se ve claramente en las fotos.
La forma más fácil para elaborarla es: Rellenar, cortar y después recubrir con el ganaché (si esto te sigue sonando a palabrejo raro, aquí te explico en qué consiste y lo bien que te va a venir conocer la receta para hacer a partir de ahora la cobertura de todas tus tartas) al que irán pegados los lacasitos.
Unos regalices y un par de lacasitos más nos servirán para hacer las antenas de nuestra mariposa.
Y ya tenemos lista nuestra tarta que más que nunca...según la coloquemos en la mesa va a volar!! ;)
Feliz semana!