Hoy os traigo un postre fresquito, ligero, nada pesado, e ideal para terminar una buena comida o cena.
Una Tarta fría de naranja, que será un éxito entre tus comensales. Hecha con zumo de naranja natural y leche condensada, dos ingredientes ideales para este postre.
Es ideal para cualquier época del año, porque es un postre ligero, pero quizás en verano lo apreciemos mejor por su frescor y suavidad.
Espero que os guste tanto como a nosotros.
Te dejo la receta en vídeo y te invito a suscribirte a mi canal de youtube.
Ingredientes para un molde de 25x18:
- 500ml de zumo de naranja
- 200m de nata (crema de leche) para montar
- 200ml de leche
- 350ml de leche condensada
- 6 hojas de gelatina neutra, 8g en polvo
Para el caramelo:
- 6 cucharadas soperas de azúcar
- 1 cucharada de agua
Hacemos el caramelo poniendo en un cazo el azúcar y el agua, lo dejamos hervir hasta que se forme un caramelo dorado, no demasiado oscuro, mejor clarito. Lo ponemos en el molde.
Hidratamos la gelatina poniendola en agua fría durante 5 minutos.
Exprimimos las naranjas, podemos colar el zumo, pero yo lo dejo tal cual.
En un cazo al fuego ponemos la leche y la nata (crema de leche), añadimos la leche condensada, removemos hasta que todo esté integrado, cuando esté caliente , pero sin que hierva, añadimos la gelatina escurrida y lo retiramos del fuego, mezclamos bien.
Lo echamos encima de caramelo, dejamos que se enfríe unos minutos a temperatura ambiente y le ponemos unas galletas encima y lo metemos en el frigorífico hasta el día siguiente.
Lo desmoldamos como si se tratar de un flan.
Lo servimos con nata montada (crema de leche) o con rodajas de naranja fresca.
¡Queda deliciosa!
Lo mismo os apetece hacer alguna de estas recetas que os dejo en vídeo, y suscribiros a mi canal de YouTube