Así que como tengo una comida organizada, les va a tocar este postre, que, además de estar buenísimo, no necesita horno y podemos tener preparado el día anterior.
Con respecto a las diferentes capas, yo no añado azúcar a la de chocolate blanco, pero si os gusta más dulce, sólo tenéis que ir añadiendo al gusto, tened en cuenta que el chocolate ya tiene azúcar en su composición..
Yo suelo hacerla sin el fondo del molde, directamente en el plato donde la vamos a presentar, para evitar estropicios si queremos desmoldarla...
Pero si lo preferís, podéis hacerla en vasitos individuales, más cómodo a la hora de servir y transportar.
Y poco más que añadir a esta tarta, que es una delicia para los más pequeños de la casa pero que los mayores también se relamen al verla.
Pasamos pues a las explicaciones....
Ingredientes:
200 gr de galletas (maría, digestive..., al gusto)
100 gr de mantequilla
150 gr de chocolate postres
150 gr de chocolate con leche
150 gr de chocolate blanco
750 ml de nata (crema de leche) de montar
750 ml de leche
3 sobres de cuajada
100 gr de azúcar
1. - Primero haremos la base de galletas, triturando las galletas y mezclándolas con la mantequilla derretida, y la colocaremos en el fondo del molde, aplanando con una cuchara.
2. - Ahora haremos la capa de chocolate negro, ponemos a calentar en un cazo 200 ml de leche con 200 ml de nata (crema de leche) y 50 gr de azúcar, y en un vaso ponemos 50 ml de leche más para diluir un sobre de cuajada.
3. - Añadimos el chocolate troceado y cuando empiece a hervir, añadimos la cuajada , removiendo constantemente, hasta que empiece a hervir de nuevo, a fuego medio, lo dejamos dos minutos hirviendo, removiendo y apartamos.
4. - Volcamos en el molde sobre la base de galletas y metemos en el frigorífico. Aseguraros que está nivelado.
5. - Hacemos la misma operación con el chocolate con leche y sacamos el molde de la nevera, pasamos un tenedor por la superficie antes de echarle encima la otra capa, así nos aseguramos de que las capas queden unidas,
y volcaremos sobre una cuchara, sobre la capa de chocolate negro.
6. - Volvemos a introducir en el frigorífico y volvemos a repetir la operación para preparar la capa de chocolate blanco, recordad que esta capa no lleva azúcar.
7. - Y dejamos en la nevera hasta el momento de comerla. Mejor de un día para otro.
Desmoldamos, decoramos y..... lista!!!!!!
Un tarta vistosa, sencilla y deliciosa!!!!!!!
FELICES FIESTAS Y FELIZ 2016!!!!!!