Las acelgas son una de las verduras que más me gustan. Ayudan a cuidarnos por dentro y, como dicen por ahí, “eso se nota por fuera”. Nos ayudan a regular nuestro colesterol, al ser un alimento rico en yodo, también ayudan a procesar los hidratos de carbono, fortalecer el cabello, la piel y las uñas. Todo un tratamiento de belleza interior y exterior, jeje.
Al añadirle hoy las gambas, le vamos a dar un aporte de sabor y un aporte proteico extra.
También podemos preparar esta tortilla con espinacas, como más os guste, o lo que tengáis más a mano. Aún recuerdo, cuando de pequeña, mi madre preparaba las tortillas de espinacas y nos las comíamos porque, al igual que Popeye, después seríamos mucho más fuertes!! Terminábamos nuestro plato e íbamos corriendo a apretar la mano de mi madre para que viera lo fuertes que nos habíamos puesto después de la tortilla de espinacas, no sé si a vosotros os pasaba pero yo sentía cómo la fuerza se apoderaba de mi!! Jajaja.
Para completar el menú de hoy podemos comenzar con un Caldo Depurativo con Pasta (fideos) o arroz de primero, Tortilla de Acelgas con Gambas y de postre yogur.
Ingredientes:
Huevos
Acelgas
Gambas Peladas
Aove
Sal
Pimienta.
Elaboración:
Comenzamos poniendo una cacerila con agua al fuego y cuando empiece a hervir echamos un poco de sal y las gambas peladas. Cuando comiencen a flotar (señal de que están cocidas) las sacamos y en ese mismo agua ponemos a cocer las acelgas. Cuando estén cocidas las escurrimos muy bien.
En una sartén con un chorrito de aceite de oliva virgen extra rehogamos las acelgas junto con las gambas. Salpimentamos.
Mientras vamos a ir batiendo los huevos, con energía, para que les entre bastante aire y nos quede una tortilla esponjosa.
Cuando están bien batidos añadimos las acelgas y gambas que ya están rehogadas. Mezclamos muy bien, para que todo quede bien integrado.
En la sartén antiadherente, con unas gotitas de aove, cuajaremos la tortilla, primero por un lado y, después por el otro, a fuego medio, para que quede bien hecha por dentro y doradita por fuera.
Una vez que esté hecha por ambos lados, la tendremos lista para servir.
Que lo disfrutéis Cocinitas!! Hasta la próxima!!
Fuente: este post proviene de La Cocina de Enloqui, donde puedes consultar el contenido original.
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