Las rajas son apreciadas por su textura suave y jugosa, así como por el sabor único que aportan a los platillos. Son una parte importante de la cocina mexicana y si bien pueden ser entrada o plato único, también se utilizan para añadir un toque de calor y complejidad a otras preparaciones culinarias.
Tabla de contenidos
Características que hacen tan especiales a las rajas con queso
Chiles poblanos, la estrella de las rajas con queso
Rajas con queso picantes: ¿sí o no?
¿Cómo acompañar las rajas con queso?
4 tips para pelar fácilmente los chiles poblanos para las rajas con queso
Receta de rajas con queso
Ingredientes para la receta de rajas con queso
Cómo hacer rajas con queso fácil y en 4 pasos
Características que hacen tan especiales a las rajas con queso
Las rajas con queso son un platillo típico de la cocina mexicana, específicamente de la región de Puebla. Se cree que su origen se remonta a la época colonial, cuando los chiles poblanos eran cultivados en la región y se combinaban con los quesos locales.El término “rajas” proviene del español y hace referencia a las rebanadas o cortes finos, generalmente de chiles poblanos. Como ya hemos contado en otras recetas, por ejemplo la de Chiles en Nogada y la de Espagueti Verde cremoso con chile poblano, el chile poblano tiene un sabor ligeramente picante así que vamos sin miedo.
Las rajas con queso son muy versátiles y se pueden utilizar de diversas formas. Además de servirse como plato principal, guarnición o relleno, también se pueden agregar a sopas, arroces, tamales o incluso como topping en pizzas y hamburguesas.
Aunque el queso Oaxaca es el más tradicional para preparar las rajas, se pueden utilizar otros tipos de queso según el gusto personal. Algunas opciones populares incluyen el queso Chihuahua, el queso panela, el queso asadero o el queso manchego. Pero como verán, siempre hablamos de quesos con mucha presencia y especiales.
Las rajas con queso son una excelente opción para vegetarianos, ya que no contienen carne. Son una alternativa sabrosa y sustanciosa para aquellos que prefieren evitar los productos de origen animal.
Chiles poblanos, la estrella de las rajas con queso
Para preparar las rajas, se utilizan chiles poblanos debido a su sabor suave y ligeramente picante. Estos chiles se asan para quitarles la piel y luego se cortan en tiras. Se pueden dejar las semillas si se desea un poco más de picante, o se pueden quitar para obtener un sabor más suave.Las tiras de chiles se cocinan en una salsa, que puede estar hecha de tomate, crema, caldo de pollo o una combinación de ingredientes. También se suelen agregar cebolla y ajo para darle más sabor. La salsa se cocina hasta que los chiles estén tiernos y la mezcla tenga una consistencia espesa.
Rajas con queso picantes: ¿sí o no?
Volvamos al tema de lo picante. Cuando hablamos de chile pensamos en picante pero el nivel de picante de las rajas puede variar según las preferencias. Para un plato más suave, quitar las semillas y venas de los chiles poblanos antes de cocinarlos. Para un sabor más picante, dejar algunas semillas o utilizar chiles más picantes, como los jalapeños.Independientemente del chile utilizado, se puede suavizar el plato haciendo las rajas con crema y queso. La crema aporta un sabor suave y lácteo que complementa los chiles y el queso, añadiendo una nota de frescura y untuosidad al plato.
¿Cómo acompañar las rajas con queso?
Las rajas con queso se suelen servir con tortillas de maíz calientes, que se pueden usar para hacer tacos o quesadillas. También se pueden acompañar con arroz, frijoles refritos, guacamole, salsa verde o crema agria, según los gustos y preferencias.Si desean añadir más sabores y texturas a tus rajas con queso, pueden considerar agregar otros ingredientes. Por ejemplo, pueden incorporar champiñones salteados, elote (maíz) fresco, tomates o incluso espinacas. Estos ingredientes complementarán las rajas y agregarán más variedad al plato.
4 tips para pelar fácilmente los chiles poblanos para las rajas con queso
Asado en la hornalla: Colocar los chiles directamente sobre la llama a fuego medio-alto. Con unas pinzas, sostener los chiles por el tallo e ir girándolos de vez en cuando para asarlos de manera uniforme. El calor intenso carbonizará la piel de los chiles, facilitando su pelado posteriormente.
Asado en el horno: Precalentar el horno a 200 grados. Colocar los chiles en una bandeja para hornear y meterlos en el horno durante unos 15-20 minutos, hasta que la piel esté carbonizada y ampollada.
Bolsa de plástico: Una vez que los chiles estén asados y su piel carbonizada, colocarlos en una bolsa de plástico preferiblemente con cierre hermético. Esto ayudará a crear un ambiente de vapor facilitando el pelado de los chiles. Dejarlos en la bolsa durante unos 5-10 minutos.
Pelado: Pasado el tiempo de reposo en la bolsa, sacar los chiles y uno a uno, retirar la piel carbonizada. Se puede hacer con las manos, frotando suavemente la piel, o también se puede utilizar un cuchillo para rasparla. La piel debería desprenderse fácilmente, revelando la carne suave y asada de los chiles.
Receta de rajas con queso
Si les sobran rajas con queso, pueden refrigerarlas en un recipiente hermético por hasta 3 días. Al recalentarlas, asegurarse de hacerlo de manera gradual y a fuego medio-bajo para evitar que el queso se queme o se vuelva gomoso.Rinde: 4 porciones
Tiempo de preparación: 50 minutos
Ingredientes para la receta de rajas con queso
4 chiles poblanos grandes asados y sin piel
1 cebolla blanca, cortada en juliana
2 dientes de ajo, picados
200 gr de queso Oaxaca (o cualquier otro queso que se derrita fácilmente)
2 cucharadas de aceite vegetal
Sal a gusto
Cómo hacer rajas con queso fácil y en 4 pasos
En una sartén grande calentar el aceite vegetal a fuego medio. Agregar la cebolla y el ajo picados y cocinar hasta que estén suaves y ligeramente dorados.
Cortar en tiras los chiles bien limpios y sin piel. Echar las tiras en la sartén y cocinar durante unos 5 minutos revolviendo ocasionalmente, para que los sabores se mezclen. Salar a gusto.
Desmenuzar o rallar el queso Oaxaca y esparcir generosamente sobre las rajas. Reducir el fuego a bajo y cubrir la sartén con una tapa para permitir que el queso se derrita lentamente.
Una vez que el queso esté completamente derretido, retirar la sartén del fuego y servir las rajas con queso calientes.